En el corazón del vasto archipiélago indonesio, la isla de Sumba, en Indonensia, emerge como un refugio de autenticidad cultural y naturaleza indómita.
Ubicada a un par de saltos de Bali, esta joya remota se extiende a lo largo de colinas y paisajes volcánicos, con un desarrollo mínimo que preserva sus raíces ancestrales, tal como cuenta la National Geographic Traveller británica.
Aquí, las tradiciones y creencias indígenas coexisten con un enfoque contemporáneo en el bienestar, dando lugar a una experiencia única que combina espiritualidad, aventura y lujo.
Enmarcada por acantilados volcánicos y playas doradas, es una isla atravesada por dos únicas carreteras principales. Su tamaño, 15 veces mayor que Singapur, contrasta con su baja densidad de población y un sentido de aislamiento que resulta profundamente encantador.
En este entorno, las aldeas tradicionales rodean tumbas megalíticas, testimonio de la religión Marapu, una práctica espiritual que rinde culto a los ancestros. Esta conexión cultural se manifiesta en festivales como el Pasola, un evento anual donde los habitantes compiten en lanzamientos de lanzas montados a caballo, una muestra de identidad profundamente arraigada en las costumbres locales.
El turismo masivo aún no alcanzó a Sumba, lo que permite a los visitantes explorar un paraíso casi intacto, donde el ritmo de vida fluye al compás de la naturaleza.
Naturaleza y bienestar
Este alojamiento integra prácticas ancestrales con programas de bienestar que resaltan la belleza y riqueza de la isla. Nihi Sumba ofrece a sus huéspedes algo más que una estancia: una inmersión profunda en la naturaleza y las tradiciones locales.
Desde terapia ecuestre y sesiones de yoga sobre el lomo de los caballos, hasta paseos terapéuticos por las aguas cristalinas de la playa Nihiwatu, las opciones combinan el contacto animal con técnicas modernas de relajación.
Para quienes buscan una conexión más íntima con el entorno, el resort propone safaris de spa. Estas experiencias, disponibles en versiones de medio día o día completo, comienzan con una travesía por la jungla que puede realizarse a pie, en bicicleta, a caballo o en un vehículo todoterreno.
El destino es un rincón apartado junto al mar, donde el sonido de las olas acompaña tratamientos únicos, como el masaje de cabeza con Sumba 7 Detox Oil, un aceite formulado con ingredientes locales como cúrcuma, jengibre y mangostán, que resalta el carácter distintivo de la flora de la región.
Otras actividades, como la meditación acuática y los entrenamientos bajo el agua, forman parte de un enfoque integral que busca revitalizar cuerpo y mente, utilizando el impresionante entorno natural como escenario.
Alojamiento y sustentabilidad
La bienvenida en Nihi Sumba, bajo el lema The Edge of Wildness (El límite de la naturaleza salvaje), marca el inicio de una experiencia diseñada para equilibrar lujo y autenticidad.
El resort cuenta con 28 villas privadas, inspiradas en la arquitectura tradicional de Sumba, con techos en pico y acabados en textiles locales. Cada una incluye una piscina privada, ofreciendo a los visitantes un espacio íntimo para contemplar el paisaje y reconectar con la naturaleza.
La oferta gastronómica del resort no se queda atrás. Con dos restaurantes informales que ofrecen vistas panorámicas al océano, los menús combinan platos clásicos de Indonesia, como el rendang de ternera cocida lentamente, con ingredientes orgánicos cultivados en el lugar.
Fiel a una filosofía sostenible, el resort implementa prácticas como el uso de tallos de papaya en lugar de pajillas plásticas, promoviendo un turismo responsable que respeta el entorno natural.
Viaje al corazón de Sumba
El acceso a Sumba es parte de la aventura. Un vuelo de 90 minutos desde Bali lleva a los visitantes al aeropuerto doméstico de Tambolaka, donde un vehículo estilo safari los transporta a través de un paisaje pintoresco durante dos horas hasta el resort.
Los precios, que arrancan en cerca de 2 mil dólares por villa por noche, incluyen todas las comidas, con excepción de las bebidas alcohólicas.
Sumba ofrece un refugio de lujo, y una invitación a explorar una forma de vida profundamente conectada con la naturaleza y la tradición. Esta isla es un recordatorio de que el verdadero lujo reside en la autenticidad y la preservación de lo esencial.