Un grupo de arqueólogos descubrió un observatorio astronómico del siglo VI a.C. en el Templo de Buto, ubicado en la gobernación de Kafr El-Sheikh, Egipto. Este hallazgo ha sido calificado como el primero y más grande de su tipo, según informó el Ministerio de Turismo y Antigüedades de Egipto.
El observatorio construido con ladrillos de barro servía para rastrear y registrar fenómenos astronómicos, incluidas las posiciones del sol y las estrellas. Este descubrimiento aporta una mirada profunda a los avances científicos y astronómicos de la antigua civilización egipcia.
El ministro de Turismo y Antigüedades del país, Sherif Fathy, subrayó la importancia de dar más atención a las misiones arqueológicas y seguir explorando su rica historia. “Esto confirma la habilidad y maestría del antiguo egipcio en ciencias astronómicas desde tiempos inmemoriales”, afirmó Fathy. La construcción del observatorio fue crucial para determinar el calendario solar y organizar ceremonias religiosas y oficiales, como las coronaciones reales y el calendario agrícola.
Qué hallaron los profesionales en el proceso
Durante las excavaciones, los arqueólogos hallaron un reloj de sol inclinado hecho de piedra caliza, un instrumento esencial para medir el tiempo en la antigüedad. Este reloj de sol consistía en losas de piedra caliza de 4,8 metros de largo, cubiertas con cinco bloques de piedra lisa. De acuerdo con The Jerusalem Post, estos bloques contenían líneas inclinadas para rastrear el movimiento del sol y las sombras durante el día.
El observatorio descubierto tenía un diseño arquitectónico notable, incluyendo una entrada que miraba al este, donde sale el sol, un pasillo central en forma de L con columnas, y un enorme muro de ladrillos de barro con inclinación hacia adentro, similar a las fachadas tradicionales de los templos egipcios. Ayman Ashmawi, jefe del Sector de Antigüedades Egipcias explicó que “el observatorio es el más grande de su tipo de ese período, abarcando un área de aproximadamente 850 metros cuadrados”.
También se encontró una sala circular dentro del observatorio, con una plataforma de piedra adornada con grabados que representaban movimientos solares. Además, los arqueólogos descubrieron cinco habitaciones de ladrillo de barro que probablemente fueron utilizadas para almacenar herramientas relacionadas con la función del observatorio. “Todo lo que encontramos rompió nuestras expectativas”, declaró el director general de Antigüedades de Kafr El-Sheikh, Hossam Ghonim.
Entre los hallazgos se incluyen varios artefactos, como una estatua de granito gris del rey Psamético I, quien gobernó durante la Dinastía XXVI, figuras de bronce del dios del inframundo Osiris y del dios halcón Horus, así como otras herramientas de medición. Ghonim dijo a Live Science que estas herramientas permitieron a los antiguos egipcios rastrear los movimientos de los objetos celestiales con precisión, utilizando tecnologías simples pero eficaces como los relojes de sol y de sombra.
El hallazgo de un mural en una gran sala con tres paredes revestidas de mortero amarillo y una pintura borrosa en azul de un barco ceremonial es uno de los aspectos más destacados de la excavación. Este barco ceremonial incluye ocho santuarios y representa las deidades Horus y Wadjet, simbolizando el universo y su conexión con el sol, la luna y otras deidades claves del templo de Buto.
La misión arqueológica en el sitio, llevada a cabo por el Consejo Supremo de Antigüedades de Egipto, reveló muchos más detalles fascinantes sobre cómo la astronomía estaba profundamente integrada en la vida espiritual y cotidiana de los antiguos egipcios. Según el Ministerio de Turismo y Antigüedades, en la sala circular del observatorio se encontraron bloques de piedra instalados en el suelo, que probablemente se utilizaron para tomar medidas de la inclinación del sol.
Este descubrimiento no solo permite ampliar el conocimiento sobre la ciencia antigua, sino que también destaca la importancia de las técnicas y herramientas utilizadas por los antiguos egipcios para observar y registrar los fenómenos astronómicos. Los expertos del Ministerio de Turismo y Antigüedades de Egipto mencionaron que, aunque las herramientas eran simples, proporcionaban información valiosa sobre los avances científicos y astronómicos de la época.