Ben Kilner, un hombre de 36 años originario de East Sussex, Inglaterra, construyó una canoa-bicicleta con la que pretende atravesar Escocia, recorriendo más de 240 kilómetros. Kilner, quien pasó dos meses fabricando su singular artefacto, partirá desde Fort William remando por el Canal de Caledonia hasta Inverness, para luego regresar en bicicleta por tierra a lo largo de la Great Glen Way.
Propósito benéfico
El desafío de Kilner no solo tiene un propósito de aventura: su objetivo es recaudar 2.900 euros (aproximadamente 3.050 dólares) para la organización benéfica A Leg To Stand On, que proporciona prótesis a niños en países en desarrollo. La iniciativa surgió tras una experiencia propia en la que, después del accidente que sufrió en un viaje, quedó sin poder caminar durante varios días. “Fue muy perturbador y puso de relieve lo mucho que dependo de mi movilidad y lo mucho que la damos por sentado”, afirmó Kilner en una entrevista con BBC Radio Sussex.
El artefacto bautizado como Pedal Paddle está compuesto por tres bicicletas y media, integradas con una canoa. “Es una canoa con armazón de piel hecha de abeto Douglas y roble verde curvado al vapor con una piel de nailon balístico, estirada sobre ella”, explicó Kilner en un video compartido en TikTok. “La razón por la que elegí ese diseño fue porque es súper liviana y algo que puedo construir yo mismo con relativa facilidad”, añadió.
La creación del Pedal Paddle: una canoa única
Uno de los mayores retos del viaje será la estabilidad del artefacto y la resistencia al viento. “Estoy sentado bastante alto junto con el mecanismo de la bicicleta Pedal Paddle, por lo que es bastante inestable”, afirmó Kilner. Además, añadió: “La canoa tiene un solo casco y lo ideal sería que tuviera un centro de gravedad bajo”. A pesar de estos desafíos, Kilner confía en que su ingenio le permitirá completar el viaje sin mayores contratiempos.
Se espera que esta travesía, dure aproximadamente nueve días e incluirá acampadas al aire libre, aprovechando que en Escocia se permite hacerlo en terrenos públicos, a diferencia del resto del Reino Unido. El hombre prometió mantener a sus seguidores actualizados sobre su progreso mediante publicaciones diarias en Facebook, Instagram y TikTok.
La canoa-bicicleta, que pesa aproximadamente 40 kilogramos, representa un hito para el hombre de Inglaterra. Él ya había enfrentado un desafío similar cuando construyó una canoa en tres días y recorrió 240 kilómetros a lo largo del río Támesis. Con esta hazaña obtuvo más de 100 millones de visualizaciones en sus redes sociales. En esta ocasión, Kilner espera no solo atraer miradas, sino también inspirar a otros a explorar su creatividad y el mundo que les rodea. “El objetivo de este desafío es inspirar a la gente a salir y explorar el mundo”, declaró.
El aventurero consiguió más de 700.000 seguidores en sus distintas cuentas de redes sociales y, de esta manera, sus seguidores pudieron acompañarlo en la evolución de sus proyectos. “La respuesta de recaudación de fondos ha sido bastante buena. He recaudado alrededor del 70 por ciento de mi objetivo hasta ahora”, señaló Kilner.
Ben concluyó expresando su entusiasmo por el viaje: “Estoy emocionado por ver la gran magnitud del lago Ness y el Gran Glen y sumergirme en eso”. La travesía de ida y vuelta, estimada en alrededor de 240 kilómetros, pondrá a prueba la resistencia física de Kilner pero también la efectividad y durabilidad de su innovadora embarcación.