En la costa sudoeste de Noruega, donde el susurro del Mar del Norte acaricia la tierra, florece la ciudad de Bergen. Con una población cercana a los 280,000 habitantes, esta urbe, la segunda más grande del país, es un lugar donde el dinamismo urbano se entrelaza con el encanto pintoresco de un pueblo.
Su corazón late con fuerza en Bryggen, el barrio histórico declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Un conjunto de edificaciones de vivos colores que reflejan tiempos en que Bergen era el epicentro del comercio entre Noruega y Europa. Hoy, Bergen es más que un vestigio de tiempos antiguos; es un vibrante punto de encuentro donde museos, restaurantes, tiendas y galerías narran historias del pasado mientras dan vida al presente.
El bullicioso mercado de pescado de Bergen, localizado no muy lejos de Bryggen, ha sido un lugar de intercambio desde 1276. Aquí, el aroma de pescado fresco se mezcla con el de frutas, verduras y productos artesanales, que se ofrece una muestra de la diversidad y riqueza de la región. En días soleados, el mercado se extiende al aire libre, que ofrecen a locales y turistas la oportunidad de degustar platos frescos preparados al momento, una experiencia que es esencial para cualquier visitante.
Bergen también es conocida como “la ciudad de las siete montañas”. Estas alturas rodean la ciudad como gigantes silenciosos y se manifiestan vistas espectaculares de la urbe y sus alrededores. Entre ellas, Fløyen y Ulriken se destacan como guardianes vigilantes. Fløyen, con sus 320 metros de altura, es de fácil acceso gracias al funicular Fløibanen, que transporta a los visitantes a la cima en apenas seis minutos. Desde allí, se despliegan rutas de senderismo bien señalizadas y permiten a quienes se aventuran disfrutar de una perspectiva majestuosa.
La montaña Ulriken, con sus imponentes 643 metros, se alza como la más alta de las siete. Su cima se alcanza mediante el teleférico Ulriken643, que lleva a los viajeros hacia panoramas sobrecogedores de fiordos, islas y montañas que rodean Bergen. Cada rincón de estas alturas invita a la contemplación y al descubrimiento, haciendo de ellas paradas ineludibles para los amantes de la naturaleza.
La esencia de Bergen se encuentra en sus paisajes naturales y en su vibrante vida cultural y académica. Con una población donde un 10% son estudiantes, la energía joven impulsa a la ciudad y refleja en sus numerosos museos y espacios culturales. KODE, uno de los mayores complejos de arte, diseño y música de los países nórdicos, acoge museos de arte y casas de compositores históricos, ofreciendo un recorrido completo por el patrimonio cultural noruego.
Por otro lado, el Acuario de Bergen es una joya que fascina tanto a grandes como a pequeños. Con más de 50 acuarios y una gran variedad de especies marinas y terrestres, este lugar invita a conocer la vida bajo el agua y acerca a sus visitantes a un mundo diferente y cautivador. Además, el Museo del Antiguo Bergen recrea en miniatura la ciudad como era en siglos pasados, con una colección de unas 50 casas de madera que datan de los siglos XVIII, XIX y XX y permite a los curiosos un viaje al pasado.
Bergen se erige con orgullo como un destino sostenible, que refleja su esfuerzo constante por minimizar el impacto ambiental del turismo y maximizar los beneficios positivos. El verde de sus alrededores y su compromiso con la sostenibilidad hacen de esta ciudad un ejemplo a seguir.
El clima en Bergen es famoso por ser uno de los más lluviosos de Europa, con más de 200 días de lluvia al año. Pero lejos de ser un inconveniente, este clima añade un carácter especial que envuelve la ciudad en una atmósfera de misterio y encanto cuando el sol finalmente hace su aparición.
Entre sus tesoros históricos, la iglesia de Santa María se destaca como el edificio más antiguo de la ciudad, que data del año 1140. Utilizada por los hanseáticos hasta el siglo XVIII, esta joya románica se eleva con sus dos torres que apuntan al cielo y un pórtico meridional que transporta a quienes la visitan a tiempos lejanos.
Con su importante puerto, Bergen no solo es un eje central del comercio marítimo noruego, sino también uno de los principales destinos de cruceros turísticos de Europa. Más del 50% de las mercancías que se manejan a nivel nacional pasan por este puerto, subrayando su relevancia en la economía del país.
Por otro lado, en relación a la comida, Big Horn Steak House y Daily Pot son dos de los restaurantes más destacados para los visitantes y residentes en esta ciudad, según la plataforma Tripadvisor. Estos locales se han convertido en paradas obligatorias para quienes buscan una experiencia culinaria de calidad.
Big Horn Steak House, fundado en Oslo en 1985, se presenta como un restaurante especializado en comida estadounidense. Su objetivo principal es “ofrecer a los clientes una experiencia destacada con carnes en un ambiente tradicional e informal”, según describe la página.
Desde sus inicios, el restaurante ha buscado replicar la atmósfera típica de las steakhouses estadounidenses, pero adaptada al gusto local. Tripadvisor destaca los comentarios positivos que recibe este establecimiento, especialmente en relación a sus hamburguesas y carnes con salsa. Este restaurante se inspira en la tradición de las steakhouses americanas, teniendo un enfoque particular en la calidad y presentación de sus platos. La combinación de una oferta culinaria consistente y un ambiente acogedor ha convertido a este restaurante en uno de los favoritos de quienes visitan Oslo y buscan una experiencia gastronómica distintiva.
En contraste, el restaurante Daily Pot ofrece una propuesta gastronómica basada en la utilización de ingredientes frescos y de temporada. Según Tripadvisor, Daily Pot se destaca por sus platos que reflejan las distintas estaciones del año. Esta combinación de sabor y creatividad ha posicionado a Daily Pot como una opción atractiva para quienes desean explorar una variedad de sabores mientras disfrutan de ingredientes frescos y de alta calidad.
Fundada hace 900 años durante la Edad Vikinga, Bergen ha sabido combinar su esplendor comercial histórico con un desarrollo moderno. A medida que la ciudad ha crecido, ha conservado su esencia, sirviendo como puerta de acceso a los famosos fiordos noruegos.