En una historia que parece sacada de un cuento de hadas, Owen y Dolly Pope lograron vivir durante 15 años en Disneyland, Anaheim, California, uno de los parques temáticos más famosos del mundo, sin que ningún visitante se percatara de su presencia. Esta increíble hazaña tuvo lugar entre 1955 y 1971, mientras la pareja se desempeñaba como trabajadores en el parque.
Owen y Dolly Pope, un matrimonio de Estados Unidos, fueron contratados por el propio Walt Disney como cuidadores y entrenadores de caballos para la sección de Frontierland. Un área del parque que estaba dedicada al Salvaje Oeste, y en esa época era restringida para la mayor parte de los visitantes, lo que permitió que la pareja pudiera vivir en el parque sin ser detectados.
En sus primeros años, los Pope vivían en una casa rodante cerca de los animales de Frontierland, área que incluía atracciones como la Mark Twain Riverboat y la Big Thunder Mountain Railroad, que eran relevantes en la vida en el antiguo Oeste estadounidense. La casa rodante estaba estratégicamente ubicada para que el matrimonio pudiera realizar sus labores de cría, cuidado y entrenamiento de los caballos sin mayores inconvenientes.
A medida que transcurrió el tiempo y su dedicación se hizo evidente, los Pope se mudaron a una vivienda conocida actualmente como “The Pope House”. Esta residencia de 120 metros cuadrados estaba situada detrás del rancho de los animales y, aunque no era accesible para los visitantes, les proporcionaba un espacio más adecuado para sus necesidades.
Frontierland, además de ser el escenario crucial para la anécdota de los Pope, también es una de las áreas temáticas más famosas de Disneyland. Con atracciones que evocan la vida en las fronteras del siglo XIX, el área incluye lugares como la Golden Horseshoe Saloon y el Tom Sawyer Island, que ofrece una inmersión completa en la historia estadounidense.
La labor del matrimonio fue esencial para el éxito de la Pony Farm, la principal atracción de cabalgatas del parque. Además de cuidar y entrenar a los caballos, la pareja también se encargaba de la construcción de carretas y carruajes, tareas que demandaban dedicación y habilidades que provenían desde la experiencia y el conocimiento en el manejo de caballos.
La estrecha relación entre los Pope y Walt Disney también permitió que la pareja disfrutara de ciertos privilegios. Según una publicación oficial, Owen y Dolly fueron las únicas personas, aparte del personal militar alojado durante la Segunda Guerra Mundial, que vivieron dentro de las instalaciones de un parque Disney. Su llegada al nuevo hogar se concretó solo tres días antes de la inauguración oficial de Disneyland el 17 de julio de 1955.
En 1971, después de 15 años de vivir y trabajar en el parque, los Pope se trasladaron a Florida para continuar su trabajo en el recién inaugurado Magic Kingdom de Walt Disney World. Allí se hicieron cargo del “Tri Circle D Ranch”, conocido por su colección de carruajes históricos y por ser el hogar de los caballos que participan en diversas atracciones del parque. Su traslado marcó el fin de una era en Disneyland, pero el comienzo de una nueva aventura en Disney World.
Owen y Dolly se jubilaron cuatro años después, en 1975, y dejaron un legado imborrable en la historia de los parques Disney. A lo largo de los años, “The Pope House” ha sido movida y reutilizada de diversas maneras, y aunque ya no es una residencia, actualmente sirve como sala de reuniones para empleados en el centro de empleados de Cast Place, cerca del edificio Team Disney Anaheim. La casa mantiene parte de la decoración original, con una placa conmemorativa, y aún es un símbolo del compromiso y dedicación de los primeros cuidadores de Disneyland.