Los países con menor densidad poblacional del mundo se distinguen por vastas regiones casi deshabitadas, donde las condiciones geográficas y climáticas extremas dificultan la vida humana. Estos lugares presentan desafíos únicos para la gestión y distribución de la población
En estas naciones, las extensas áreas sin población están caracterizadas por su belleza natural y una notable biodiversidad. Sin embargo, las adversidades geográficas como desiertos, montañas y climas severos hacen que habitar estos sitios sea complicado. Estos factores obligan a sus gobiernos a implementar políticas específicas para manejar la dispersión de sus habitantes.
Australia
Australia, el sexto país más grande del mundo, posee una vasta extensión territorial de unos 7,69 millones de kilómetros cuadrados, equivalente a la de Estados Unidos sin Alaska, y duplica la de India, según publicaron varios medios respetados. Sin embargo, su población es de solo 24,8 millones de habitantes, lo que le convierte en el segundo país con menor densidad poblacional del mundo, con apenas 3,4 habitantes por kilómetro cuadrado.
La vasta densidad poblacional de las zonas costeras australianas contrasta notablemente con la escasa población del desierto interior
El 97% de los habitantes de Australia residen en las zonas costeras, una cifra que pone en evidencia la preferencia de la mayoría por vivir cerca del mar. Esta densa concentración poblacional deja al desierto australiano, como es el caso de Outblack con solamente el 3% de la población, a pesar de ocupar más de un tercio del territorio del país.
Mongolia
Mongolia es el país con menor densidad de población en el mundo, con un registro de aproximadamente 1.55 habitantes por kilómetro cuadrado en ciertas zonas, como el desierto de Gobi y las estepas.
Esta baja densidad de población se debe a que un tercio del territorio mongol está ocupado por estos ecosistemas, los cuales son inhóspitos y difíciles para la vida humana. Sin embargo, pese a las duras condiciones, estas regiones sostienen diversas especies animales y vegetales.
El desierto de Gobi y las estepas representan áreas donde la vida humana es escasa debido a las extremas condiciones climáticas y de terreno. Estas zonas cubren una parte significativa del país, contribuyendo sustancialmente a la baja densidad demográfica de Mongolia.
Según algunos análisis geográficos y demográficos, la dispersión de la población en Mongolia está marcada por centros urbanos con mayor concentración de habitantes, mientras que vastas áreas rurales permanecen casi sin población. Los humanos tienden a evitar estas áreas debido a la falta de recursos y las duras condiciones ambientales.
Las estadísticas muestran que Mongolia, en contraste con países más densamente poblados, enfrenta desafíos únicos en cuanto a la distribución y gestión de su población. La mayoría de la población mongola se concentra en la capital, Ulán Bator, y otras ciudades principales, dejando grandes extensiones de terreno casi inhabitadas.
Alaska
Alaska es el estado menos poblado de Estados Unidos, especialmente en su región norte y occidental. Con una densidad poblacional de apenas 17,5 habitantes por kilómetro cuadrado, esta área alberga alrededor de 65.000 personas en casi un millón de kilómetros cuadrados de bosques. Esta región sigue siendo la menos habitada del país.
Los territorios septentrionales y occidentales de Alaska, conocidos también como la “Nevera de Seward”, tienen a las ciudades Jeneau y Anchorage como sus principales centros urbanos. A pesar de su pequeño número de habitantes, la región cuenta con una notable diversidad de climas. Los primeros establecimientos humanos en esta área datan de hace aproximadamente 14.000 años, cuando los pioneros cruzaron el Estrecho de Bering.
A diferencia de los distritos más poblados del sur, cercanos a la frontera con Canadá, la región norte y occidental de Alaska posee vastos terrenos de tundra y bosques. Los residentes coexisten con una fauna local diversa y una amplia variedad de especies vegetales endémicas.
Islandia
Islandia se destaca por sus paisajes y baja densidad de población, con una superficie de 103.000 kilómetros cuadrados y una población de aproximadamente 350.000 habitantes. El suroeste del país, donde se encuentra Reikiavik, es la región más densamente poblada.
Westfjords es una región conocida por sus impresionantes paisajes y la ausencia de turismo masivo. Según datos de la página web Loney Planet, solo un 10 % de los visitantes de Islandia llega a esta zona, enfatizando su carácter remoto y menos explorado en comparación con otras áreas del país.
Un punto de interés en el extremo noroccidental de Westfjords es la reserva natural Hornstrandir, un paraíso para mochileros. Esta península, remota y casi despoblada, alberga una abundante fauna y flora, incluyendo al único mamífero nativo de Islandia, el zorro polar. Es un refugio ideal tanto para la biodiversidad como para los amantes de la naturaleza que buscan tranquilidad y aventura.