El 8 de noviembre de 2015 se alcanzó el peculiar y admirado récord establecido por Otto, el “Bulldog skater” peruano que, al deslizarse en patineta por debajo de las piernas de 30 personas alineadas, se convirtió en el protagonista del túnel humano más largo recorrido por un perro. Este acontecimiento ocurrió enel Parque Yitzhak Rabin Lima, Perú.
El fenómeno de Otto no emergió de la nada. Inspirados por Tillman, el anterior poseedor del récord Guinness como el perro más rápido en patineta, Luciana Viale y Robert Rickards decidieron que querían un Bulldog que pudiera seguir esos pasos, o más bien, esas ruedas. Otto cumplió con esas expectativas y también las superó. Además logró otras hazañas, como surfear, jugar al fútbol y, claro está, patinar con una habilidad sorprendente.
De quién fue la idea
La idea del récord del túnel humano surgió de manera fortuita cuando Luciana jugaba con Otto, quien, en un impulso de entusiasmo, se lanzó hacia ella en patineta, obligándola a abrir las piernas para evitar un choque. Ese fue el momento en que nació la idea de este récord. Pero Otto no estaba solo en sus aventuras ya que compartía su hogar y trucos con Lolita, otra Bulldog que también disfrutaba del skateboarding.
La fama de Otto trascendió rápidamente las fronteras de su hogar. Tras establecer el récord, Otto se convirtió en un nombre conocido a nivel mundial. También se transformó en una figura representativa en las redes sociales al acumular más de 80 mil me gusta en su página de Facebook. Además fue nominado a los World Dog Awards.
Más allá de la fama y el record, los dueños de Otto aprovecharon su notoriedad para fomentar buenas causas, promoviendo la tenencia responsable de mascotas y apoyando a organizaciones dedicadas a la adopción de animales sin hogar.
Además, Otto se ha involucrado con organizaciones benéficas y apoyó a personas en situaciones desfavorables y visitó a niños con cáncer, mostrando que detrás de su talento en patineta, hay un corazón grande dispuesto a ayudar. Otto también ha colaborado con marcas, como se evidenció en su aparición en un anuncio de una marca suiza de ropa de alta visibilidad, donde demostró sus habilidades en una patineta con ruedas luminosas.
El legado de Otto
El famoso perro murió a los siete años en diciembre de 2019. La noticia fue comunicada por sus dueños. A través de un mensaje informaron que el perro no logró superar una enfermedad que lo mantenía en tratamiento en una clínica veterinaria desde hace varias semanas.
En sus redes sociales dijeron: “Hoy, a las 2:30 p. m Otto partió de este mundo. Se nos fue un ser excepcional, cuyo nombre ya es sinónimo de leyenda. Otto, a quien amamos profundamente como hijo, amigo y fuente de alegría, ha dejado un vacío inconmensurable en nuestras vidas”.
Este bulldog inglés dejó su marca en el skate y también extendió su legado a través de sus hijos. Tuvo cachorritos a inicios de 2018 con una perra llamada “Lolita”. Estos cachorros mostraron desde muy temprana edad una inclinación hacia el skate, lo que hace pensar que podrían seguir los pasos de su padre.