Desde hace unos días, el peso mexicano es tema de conversación. Y es que su precio frente al dólar americano se ha fortalecido. En los últimos meses, el peso ha presentado su mejor desempeño frente al dólar estadounidense, e incluso se le ha conocido como “el súper peso”. Sin embargo, esta fortaleza se la debe más al país que emite esa moneda, Estados Unidos, que al propio gobierno mexicano.
Y es que la economía más grande de todo el mundo se encamina a una recesión en 2023 y los incrementos que ha hecho la Reserva Federal a la tasa de interés para combatir la inflación han debilitado al dólar, no solo frente al peso, sino frente a otras monedas emergentes.
El dólar actualmente tiene un valor menor a 19 pesos, pues hasta el viernes equivalía a 18.7699 pesos, algo que no se veía desde hace algunos años. Aunque el dólar desde hace varias décadas tiene un valor mucho mayor al del peso, esto no siempre fue así, pues hubo una época en la que el peso mexicano valía más que el dólar.
Esto pasó por más de 50 años, entre 1820 y 1875. Cuando México logró independizarse de España, en 1821, el peso tenía un valor mayor al del dólar estadounidense.
Sin embargo, a finales del siglo XIX, Estados ya iba formándose como una gran potencia mundial y su economía se iba fortaleciendo poco a poco. En cambio, el valor de la moneda mexicana se debilitaría debido al ocaso de imperios coloniales y la entrada del sistema monetario que se basaría directamente en el oro.
En el año de 1859, un peso mexicano valía 1.08 dólares, y para 1875, un peso mexicano equivalía a 1.01 dólares. De esta manera, poco a poco con el tiempo fue disminuyendo, hasta caer, en 1900, en 0.42 dólares por peso. Poco a poco la devaluación de la moneda fue creciendo.
Época en la que el dólar estadounidense y el peso mexicano valían lo mismo
En los últimos días se ha hablado mucho del “súper peso”, pues la moneda mexicana ganado fuerza frente al dólar, al romper la barrera de los 19 pesos, y colocando a la moneda norteamericana por debajo de esa cantidad. Sin embargo, durante la época porfiriana, el peso y el dólar valían lo mismo.
Posiblemente, eso ayudaba a que la economía del país también fuera buena. En 1910, alrededor del 85% de la población mexicana eran analfabetas, aunque en las zonas rurales era superior, pues la mayoría de las escuelas estaban en las ciudades, por lo que podían encontrarse hasta pueblos enteros que no sabían leer. Y solo el 5% de la población, asistía a la escuela.
Fue durante esta época y en ese contexto en la que el dólar americano y el peso mexicano tenían el mismo valor. Esto, gracias a la política económica del secretario de Hacienda José Yves Limantour, quien pertenecía al grupo denominado como “los científicos” de Díaz. En su gestión, los precios de la canasta básica no variaban, e incluso había algunas mercancías que llegaban a bajar de precio de un año al otro.
De esta manera se logró una balanza comercial favorable para el país, lo que quiere decir que se exportó más de lo que se importó. “La nivelación de ingresos, el arreglo de la deuda y la organización de Hacienda, fueron fundamentales”, dijo José Yves Limantour. También, el secretario de Hacienda de la época pidió a Díaz que se atrajera capitales europeos para que se contrarrestara la influencia de los Estados Unidos, y así poder negociar con los vecinos del norte desde una posición que favoreciera a México.