La captura de Ovidio El Ratón Guzmán atentó contra la tan defendida ideología del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) de “abrazos no balazos”. Esto, luego que el operativo dejara a 29 muertos (10 pertenecientes a las Fuerzas Armadas (FFAA) y 19 sicarios) tras un intenso intercambio de disparos.
En palabras del periodista Carlos Loret de Mola, la detención del hijo de Joaquín El Chapo Guzmán implicó que el Ejército entrara a una guerra contra el narcotráfico en Culiacán, Sinaloa - donde se llevó a cabo pa aprehensión: “Aunque le duela al presidente leerlo con todas sus letras”, aseveró en su columna para El Universal.
“Ovidio no cayó por el dinero de los programas sociales ni por abrazar maleantes o por ordenar a los militares dejarse humillar. Cayó porque se usó toda la fuerza del Estado”.
Cabe destacar que López Obrador se vio obligado a irrumpir su tan defendida - y polémica - ideología pilar de su estrategia de seguridad; gracias a ello, es que su Gobierno logró recapturar al capo de renombre y uno de los más buscados en Estados Unidos (EEUU).
Esto habría aperturado en la opinión pública la posibilidad que López Obrador, finalmente, considerara la reconfiguración de la táctica con la que ha intentado enfrentar a la delincuencia organizada y reducir los índices de violencia “heredados de sexenios anteriores”. No obstante, para Loret de Mola el presidente de México no estaría dispuesto a modificar su política de seguridad.
“¿Será que en el año 5 ha decidido empezar a rectificar? ¿Querrá salvar su legado en lugar de heredar una bomba de tiempo? (...) No creo”, afirmó en su escrito.
Bajo ese sentido, el también colaborador de Latinus reafirmó que el intenso operativo liderado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) no se emprendió por el interés del mandatario para “dar un giro en la política de seguridad y en su pacto con el crimen organizado”, sino por el contrario, aseveró, era una obligación que AMLO “hubiera preferido evitar”.
“Este no es un presidente que suele reconocer errores y enmendar. Él se sigue por su ruta y hasta donde tope”.
Prueba de ello, atajó Loret, fue el perdón que López Obrador externó por las pérdidas humanas del pasado 5 de enero, tanto por parte de los cuerpos castrenses como de los miembros del crimen organizado: “Aunque se trate de personas que tomaron el camino de las conductas antisociales, también nos duelen el que pierdan la vida y lo sentimos mucho por sus familiares. Nosotros estamos por la defensa de la vida, queremos vivir en paz”, lamentó el tabasqueño en la mañanera del 9 de enero.
Funcionarios de EEUU negaron nexo entra captura de Ovidio Guzmán y visita de Joe Biden
El pasado 9 de enero, el gobierno de EEUU que la captura de El Ratón Guzmán López estuviera coordinada con la visita del presidente estadounidense, Joe Biden, a México en el marco de la X Cumbre de Líderes de América del Norte.
“Esas cosas no son así”, dijo a la agencia EFE un alto funcionario de la Administración estadounidense pocas horas antes que López Obrador recibió Biden para una reunión bilateral en Ciudad de México (CDMX) sobre inmigración y narcotráfico.
El también líder de la facción Los Menores, del Cártel del Pacífico, figura como uno de los objetivos principales de extradición para EEUU por tráfico ilícito de drogas; incluyendo el fentanilo, cuyo combate fue abordado en la Cumbre Trilateral.
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