Iván Archivaldo Guzmán Salazar, el medio hermano de Ovidio Guzmán López, alias “El Ratón”, quien fue capturado la semana pasada en la sindicatura de Jesús María, es considerado como el cabecilla principal de la facción liderada por los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, mejor conocida como “Los Chapitos”.
Iván Archivaldo tendría 39 años de edad y según uno de los tantos documentos de carácter confidencia del Ejército mexicano que el grupo de activistas autodenominados como “Guacamaya” hackearon y filtraron de los servidores de la Sedena, Iván, quien también es el primogénito de la primera esposa de “El Chapo”, sería el más poderoso líder del grupo criminal.
El que es considerado como el mayor heredero de la dinastía Guzmán Loera presuntamente decidió romper el silencio hace cinco años, uno antes de la primera detención de su medio hermano “El Ratón”, cuando las mismas autoridades tomaron la determinación de liberarlo, a través de una entrevista que habría concedido a la revista de Bélgica, Knack.
La familia y el narco
La entrevista fue realizada por el periodista ecuatoriano Ernesto Rodríguez Amari, y aunque pasó desapercibida tras su publicación, en ella Iván Archivaldo contó cuál fue una de las “grandes enseñanzas” que el narcotraficante sinaloense, ahora encerrado de por vida en Estados Unidos, habría inculcado a sus hijos.
“Me siento honrado y muy feliz de decir que es mi padre. Para mí, mi padre es mi mejor amigo, y siempre lo será. Su mantra durante mi educación fue: la familia es el bien supremo. Apreciaba a su familia y no esperaba otra cosa de sus hijos. Todo el mundo habla de ‘El Chapo’ o ‘El Patrón’ cuando se refieren a Joaquín Guzmán, pero yo puedo decir ‘mi apa’, y estoy orgulloso de ello. Mi padre es un hombre de carácter, y así es como le conoce el mundo exterior, pero también es un hombre cariñoso que estaba muy unido a su familia”, supuestamente expresó Iván Archivaldo.
Una de las primeras preguntas que le hicieron fue cómo se había sentido cuando vio las imágenes de su padre siendo extraditado a Estados Unidos en una serie de fotografías que mostraron al capo esposado, sometido y en estado de indefensión.
“Sentí un dolor tremendo. Quería llorar, pero me dije que tenía que ser fuerte. No sé si alguna vez tendré la oportunidad de verlo de nuevo. Mi padre había puesto su confianza en el gobierno mexicano y éste lo entregó a los estadunidenses como trofeo. Nunca podré perdonarlos. Extraño terriblemente a mi padre”, expresó y agregó que, desde su punto de vista, el juicio en el que se le condenó a cadena perpetua no fue justo.
“Deberías preguntarle a mi novia cómo vivo”
En otro punto de la entrevista el periodista le dijo al hijo de “El Chapo” que él era considerado como un “peso pesado” en el mundo global del narcotráfico.
Sin embargo, el mayor de los hermanos Guzmán le habría respondido lo siguiente:
“¿Seguro que te refieres a mí? No tengo ambición de ser importante, y no me considero importante en absoluto. Si lo hiciera y tuviera mucho poder, no tendría que esconderme constantemente, ¿Verdad? Deberías preguntarle a mi novia cómo vivo”, remató.
“¿Puedo hablar sobre tu vida privada? Te busca la CIA, el FBI, la DEA, la Interpol y los servicios militares policiales y de inteligencia de México. ¿Esa es una vida?”, le preguntó el periodista.
“Es su trabajo buscarme y es mi trabajo esconderme. Soy consciente de que éste será el patrón por el resto de mi vida”, reconoció el supuesto hijo del Chapo.
The New York Times informó que durante el fallido operativo del 17 de octubre de 2019, conocido como “El Culiacanazo”, cuando el Ejército Mexicano detuvo por primera vez al “Ratón”, fue Iván Archivaldo quien ordenó al cártel desatar una gran violencia en la capital del estado, lo que despertó temor entre la población y provocó que los militares liberaran, a petición de AMLO, a Ovidio.
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