Quién fue el primer narcotraficante de México en ser jefe del Chapo Guzmán y de los Arellano Félix

A lo largo de la historia de México se han conocido los nombres de delincuentes muy peligrosos, muchos de ellos detenidos, pero muchos otros han logrado estar libres. Años después de la captura de Joaquín Guzmán Loera uno de sus hijos fue identificado como el líder de una facción del Cártel de Sinaloa.

La Administración para el Control de Drogas (DEA por sus siglas en inglés) de Estados Unidos identificó a Iván Archivaldo Guzmán no solo como el líder de Los Chapitos sino como el tercer hombre más buscado por las autoridades estadounidenses. Junto con su hermano Jesús Alfredo Guzmán, alias Alfredillo (quien también aparece en al lista de los más buscados) está prófugo de la justicia.

Otro claro ejemplo de prófugos es Nemesio Oseguera Cervantes, mejor conocido como El Mencho, narcotraficante que lidera al Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), quien a pesar de ser uno de los criminales más buscados en el país, las autoridades no han podido dar con su paradero para detenerlo.

Otro de los delincuentes que más han dado de qué hablar, es Joaquín El Chapo Guzmán, pues a pesar de que actualmente está preso en una cárcel de alta seguridad de Estados Unidos, en México logró escaparse de cárceles mexicanas y estar prófugo por mucho tiempo.

Algunos de los criminales no son capturados pero tiene un final trágico, como le sucedió a un hombre vinculado al Cártel de los Arellano Félix, identificado como Julio César Soto quien fue atacado a balazos en Plaza Carso de la Ciudad de México y murió en el lugar.

Entre los delincuentes, dedicados al narcotráfico, también destacan los nombres de Rafael Caro Quintero e Ismael El Mayo Zambada, entre otros. Sin embargo, hay un hombre que fue pionero en las actividades ilícitas a la que se dedicaban estas personas, pues el origen del tráfico de drogas con conexiones a otros países está ligado a su nombre. Se trata de Pedro Áviles El León de la Sierra, quien fue el primer jefe del narco en México.

El Chapo Guzmán, Caro Quintero y El Mayo Zambada tienen algo en común: que todos ellos fueron líderes o grandes jefes de organizaciones de crimen organizado que han logrado traspasar fronteras y llevar su mercancía ilegal a otros países, dejando a su paso una huella de violencia y muerte que pueden verse hasta nuestros días. Sin embargo, Pedro Avilés fue quien combinó el tráfico de drogas con conexiones internacionales.

Nacido en 1938, en la Sierra de Durango, Don Pedro, como también era conocido, fue considerado el primer narcotraficante que fomentó el trasiego de goma de opio a los Estados Unidos, además de crear conexiones con las mafias de Estados Unidos e Italia.

Según Guillermo Vásquez Calderón, un historiador, en su libro Historia del Nacotráfico en México, Avilés organizó a los campesinos dedicados al cultivo de amapola para extraer la goma de opio, que era transportada a través del corredor Culiacán-Mexicali.

Para escalar a nivel internacional y distribuir el opio más allá de la frontera de México, El León de la Sierra contó con apoyo de Benjamín Siegel, alias Bugsy, un traficante estadounidense que inició su carrera criminal como contrabandista de alcohol durante la Ley Seca, así como Charles Lucky Luciano, integrante de la familia Genovese.

En ese entonces, Siegel propuso a Max Cossman, traficante conocido como el Rey del Opio, que trasladaran la mercancía desde México. Fue cuando Don Pedro tuvo contacto con los capos que le ayudarían a comenzar su imperio en el narcotráfico, siendo mentor de otros líderes criminales como Miguel Ángel Félix Gallardo, Ernesto Fonseca y Rafael Caro Quintero.

Según el diario El Noroeste, a él se le atribuye haberle dado forma a las organizaciones criminales relacionadas al narcotráfico como se le conoce hoy en día. Áviles Pérez organizó a cultivadores de amapola en Sinaloa, en regiones conocidas actualmente como el Triángulo Dorado, para producir la goma de opio, misma que era vendida en los Estados Unidos y que tuvo un gran auge tras la Segunda Guerra Mundial para aliviar dolores de veteranos, reemplazando a la morfina.

El opio cultivado en Culiacán pasaba a Baja California, y de ahí conectaba con Estados Unidos. Don Pedro extendió sus operaciones hasta la región fronteriza de Sonora y Tijuana. A lo largo de su trayectoria, El León de la Sierra tuvo a su cargo a los hermanos Arellano Félix, Beltrán Leyva, El Chapo Guzmán y Amado Carrillo Fuentes, que continuaron con el crimen organizado en diferentes puntos del país.

Su historia terminó el 15 de septiembre de 1978, cuando fue emboscado y abatido por el Ejército mexicano, luego de ser desarmado en la ciudad de Culiacán, Sinaloa. Su muerte aceleró la formación del Cártel de Guadalajara, antecesor del Cártel de Sinaloa.