A través de un documento del Ayuntamiento de Arizpe, Sonora la alcaldesa de la entidad, Alma Isela Medina Maldonado, compartió información sobre el comandante Moranes Loera, quien presentó su renuncia a finales del mes de diciembre. Junto con él también miembros de la Policía Municipal dejaron sus cargos.
“El comandante Ramón Laureano Moranes Loera presentó su renuncia con fecha 30 de diciembre del año anterior, aduciendo motivos profesionales y personales, junto a otros elementos de la policía municipal”, se puede leer en el comunicado con fecha del 2 de enero.
Por su parte el gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, comentó que el comisario se va a Huásabas lo que provocó reubicaciones, pero que efectivos de la Policía Estatal de Seguridad Pública (PESP) mantienen la seguridad.
“Lo que sucede ahí es que el comisario de Arizpe se va como comisario a Huásabas y eso generó algunas reubicaciones de los propios elementos que ahí estaban, pero en este momento está debidamente cubierta la seguridad” dijo Durazo al ser cuestionado.
En total renunciaron nueve agentes el pasado 30 de diciembre, medios locales registraron que los mismos pobladores informaron de los hechos en un primer momento. Reportes no oficiales señalaron que la razón por la que se habrían presentado las renuncias sería presuntas amenazas de grupos delictivos de la zona, sin embargo, dicha información no ha sido confirmada.
“La población está en completo orden, con la calma natural de nuestra comunidad, (...) la Secretaría de Seguridad Pública del Estado ya ha enviado elementos para hacerse cargo de manera provisional de la Seguridad de la población”, se pudo leer en el comunicado oficial.
Policías fueron agredidos en Zacatecas
Autoridades de Zacatecas reportaron el primer ataque en contra de elementos de la policía el cual sucedió durante la madrugada del 1 de enero en el municipio de Loreto. La agresión derivó de un reporte sobre detonaciones de arma de fuego.
Para revisar los hechos cuatro uniformados se trasladaron a la zona para brindar apoyo, sin embargo, fueron interceptados por personas armadas quienes iniciaron las detonaciones contra los miembros de seguridad lo que derivó en un intercambio de balas entre los policías y el comando armado.
Como resultado dos oficiales tuvieron que ser llevados a hospitales para ser atendidos sin que se reportaran decesos, por su parte los atacantes huyeron del lugar al verse superados por las autoridades.
Un operativo de seguridad se desplegó en la zona con la finalidad de encontrar a los supuestos criminales, pero no se reportaron detenciones. Cabe destacar que Adolfo Marín Marín, secretario de Seguridad Pública estatal, detalló que los policías no fueron heridos de gravedad.
También durante el 2 de enero se registró una balacera en Chihuahua, lo que dejó como resultado, según refieren los primeros reportes, un policía muerto y cuatro supuestos sicarios abatidos, quienes atacaron a los uniformados. Como resultado se desplegó un operativo por parte de los tres niveles de gobierno para garantizar la seguridad de la zona.
Las acciones violentas suceideron tan solo un día después de que se registró un ataque y fuga en un penal de Ciudad Juárez, Chihuahua. Lo cual derivó en que dos cabecillas del grupo Los Mexicles se fugaran del lugar.
Durante la madruga del 1 de enero un comando armado realizó ataques al Centro Estatal de Reinserción Social (Cereso) No. 3 de Ciudad Juárez lo que derivó en la fuga de 30 reos, entre ellos estaba Ernesto Alfredo Piñón de la Cruz, alias El Neto.
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