La escultura maya con forma fálica de más de 150 kilos que INAH encontró en Yucatán

Esta figura usualmente representa tanto la fertilidad humana como la agrícola, anteriormente ya se había localizado a una representación del dios Yum Keep

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Es la primera pieza de carácter dual en la Zona Arqueológica de Oxkintok

Un grupo de arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de México encontró una escultura con forma de falo, aunque esta figura es común en la región Puuc de Yucatán, la pieza de aproximadamente 150 kilos de peso tiene otra particularidad, ya que del otro lado es la representación de un hombre, esta es la primera en su tipo que se encuentra en un sitio maya.

La forma fálica de la figura representaría la fertilidad, tanto la humana como la agrícola. Además, la pieza fue probablemente “matada ritualmente”, esto significa que tanto la cabeza como los pies del sujeto representado fueron rotos intencionalmente, ya sea para marcar el fin de su ciclo o asociarla a la renovación o abandono del espacio en donde fue encontrada, es decir, la Zona Arqueológica de Oxkintok, ubicada en Maxcanú, Yucatán.

El investigador destacó que es la primera figura dual que se encontró en esta zona (Cortesía Luis Pantoja, investigador del Centro INAH)
El investigador destacó que es la primera figura dual que se encontró en esta zona (Cortesía Luis Pantoja, investigador del Centro INAH)

Esto se determinó porque los especialistas no pudieron encontrar los fragmentos faltantes en la zona. El hallazgo ocurrió el 23 de noviembre durante los trabajos de consolidación de la Estructura DZ-7 del Grupo Ah Dzib, en el noreste de la plaza principal.

Respecto a la figura, el arqueólogo y director del proyecto Oxkintok, Luis Pantoja Díaz, explicó lo siguiente:

(Cortesía Luis Pantoja, investigador del Centro INAH)
(Cortesía Luis Pantoja, investigador del Centro INAH)

“Por el lado frontal, se observa a un hombre desnudo, con rasgos anatómicos desproporcionados que alargan su torso y dan a su abdomen una apariencia flácida y por la parte posterior, la representación de un falo, donde los glúteos del individuo pueden interpretarse como los testículos y dos comisuras a la altura de los hombros asemejan un glande”.

Ya que la pieza no tiene atributos suprahumanos distinguibles, no se puede considerar que esté ligada a alguna deidad. “La erosión del material solo nos permite interpretarla como una figura humana decapitada de cuyos hombres parece colgar una serpiente”.

La pieza dual es la primera en su tipo, pero no está relacionada con alguna deidad (Cortesía Luis Pantoja, investigador del Centro INAH)
La pieza dual es la primera en su tipo, pero no está relacionada con alguna deidad (Cortesía Luis Pantoja, investigador del Centro INAH)

La escultura que representa la forma de un glande y de un hombre por la parte de enfrente está hecha de piedra caliza, pesa aproximadamente 150 kilogramos y sus medidas son de 1.35 metros de alto y 53 centímetros de ancho. Los arqueólogos ubicaron a la pieza hacia el periodo Clásico Tardío (750-900 d.C).

Por sus características, la pieza podría ser incorporada al acervo del Museo de la Ruta Puuc, el cual se construye actualmente en la Zona Arqueológica de Kabah, como parte del Promeza.

La figura de 150 kilos está hecha de piedra caliza (Cortesía Luis Pantoja, investigador del Centro INAH)
La figura de 150 kilos está hecha de piedra caliza (Cortesía Luis Pantoja, investigador del Centro INAH)

La figura dual no es el único hallazgo en la zona, pues el grupo de 52 investigadores que colabora en Oxkintok encontró tres entierros humanos, uno de un hombre de edad desconocida, otro de un infante que aparentemente habría sido una niña y el de una mujer que habría fallecido entre los 20 y los 25 años; la cual tenía una ofrenda hecha con una vasija trípode de estilo Muná.

“La relevancia de estos entierros estriba en que son los primeros de gente común que encontramos en Oxkintok. Las exploraciones anteriores se habían centrado en los edificios principales de la élite; sin embargo, al explorar ahora las unidades habitacionales asociadas a esos recintos centrales, podemos ampliar nuestras nociones sobre las y los antiguos pobladores”, se mencionó, dando a entender que los tres vestigios encontrados estarían representando una forma de entierro alejada de ciertos privilegios, enfocándose más en la población.

En Oxkintok se localizaron tres entierros más, los cuales corresponderían a pobladores que no pertenecían a la élite (Cortesía Luis Pantoja, investigador del Centro INAH)
En Oxkintok se localizaron tres entierros más, los cuales corresponderían a pobladores que no pertenecían a la élite (Cortesía Luis Pantoja, investigador del Centro INAH)

Aunque el hallazgo no se trate de una deidad, los investigadores del INAH encontraron una figura muy similar, pero que corresponde al dios maya de la fertilidad: Yum Keep. El cual correspondería al Período Clásico Tardío (900-1200 d.C.)

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