“Padre pistolas” de Morelia nuevamente en el ojo del huracán; arzobispo reiteró su suspensión

El arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos, informó que desde septiembre pasado, el presbítero Alfredo Gallego Lara, también conocido como el “Padre pistolas” mantiene la “pena canónica” por lo que no tiene facultad de oficiar ningún tipo de evento religioso, así que hizo un llamado a la población a no atenderlo.

A través de un comunicado el arzobispo detalló que desde el pasado 4 de septiembre el “Padre pistolas” fue suspendido de su cargo, por lo que “NO tiene facultad para celebrar la Santa Misa, ni Primeras Comuniones, ni organizar Confirmaciones, Matrimonios, ni otra actividad del ministerio sacerdotal”.

Recordó que el pasado 20 de noviembre del 2021, Gallego Lara recibió la primera amonestación con el Monseñor Juan Espinoza Jiménez, entonces Obispo Auxiliar de Morelia, juntamente con el Presbítero José Filemón Guzmán Tapia, quienes dialogaron con él para exhortarlo a corregir su actuar religioso.

“(A cambiar) el vocabulario vulgar y ofensivo; calumnias con el obispo, los sacerdotes y los fieles; usar el altar y las homilías para promocionar remedios y curaciones; y, finalmente, la utilización de un lenguaje inapropiado contra las mujeres”.

A pesar de que se le llamó la atención y recibió la primer amonestación no cambió su forma de oficiar eventos religiosos y dirigirse tanto a fieles como a sus colegas, por lo que en septiembre del 2022 recibió la segunda y última amonestación, con la que se le prohibió el ejercicio del ministerio sacerdotal.

El arzobispo detalló en que la suspensión fue por hablar con groserías y su falta de respeto ante la comunidad religiosa, así como otras acciones contrarias a su deber, que incluye el incumplimiento en el apoyo económico para el sostenimiento del Seminario, las Misiones, Obras Piadosas de la Iglesia, entre otras que generaron escándalo entre los fieles.

Para contrariar la acción el “Padre pistolas”, en septiembre pasado habría contratado una defensa legal para que le ayudaran a revocar la decisión del arzobispado, sin embargo, no procedió, por lo que la petición fue traducida como una negativa.

“El mismo Presbítero Gallegos Lara, ayudado por abogados civiles envió una petición de revocación del decreto de suspensión, al que se le dio un silencio administrativo, lo cual significa una negativa a la petición hecha”.

Aunque la suspensión ya había sido dictada el sacerdote hizo caso omiso y continúo oficiando misas, además sin haber corregir su vocabulario, ofensas y demás aspectos por los que fue amonestado. En consecuencia el arzobispo se vio en la necesidad de recordar a la comunidad que el “Padre pistolas” no puede realizar ninguna actividad religiosa.

“Ha ejercido con abierta desobediencia el ministerio sacerdotal sin hacer caso a la prohibición (...) Se hace pública esta información para responder a todos los interesados. A quienes necesiten más precisión, les pido acudan a las oficinas del Arzobispado”.

Cabe recordar que Gallego Lara se habría hecho de su sobrenombre y amonestaciones por su forma de oficiar, pues incluso sus polémicas palabras se habrían hecho virales. Una de ellas ocurrió durante una breve entrevista en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer del 2021.

Desde la ciudad de Morelia llamó a las mujeres a manifestarse de manera pacífica a través de la cocina. “Si ustedes tienen un arma: el cariño de nosotros, los hombres y de la sociedad. Pónganse a hacer tortillas, no compren Coca-Cola. Hagan agua fresca, sopes, tamales. Enséñense a ser mujeres”.

Ese y otros comentarios polémicos habrían hecho que se hiciera popular en redes sociales pero también se ganara el cariño y odio de varias personas. Ya que iba contra la forma en que se dirige el arzobispado se le dio la suspensión.

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