Caso Gabriela Escamilla: por qué la Fiscalía la detuvo tras denunciar abuso sexual en contra de su sobrina

Aunque la mujer ya fue puesta en libertad, su situación abrió nuevamente el debate sobre la administración de la justicia y la violencia de género que continúa permeando a la sociedad mexicana

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Gaby Escamilla fue detenida luego de denunciar el presunto abuso sexual que padecía su sobrina (Twitter / @OlimpiaCMujer)
Gaby Escamilla fue detenida luego de denunciar el presunto abuso sexual que padecía su sobrina (Twitter / @OlimpiaCMujer)

Una ola de indignación se ha desatado entre la sociedad mexicana luego de que se diera a conocer el caso de Gabriela Escamilla, quien fue detenida injustamente por autoridades mexicanas luego de que intentara denunciar el presunto abuso sexual que su sobrina padecía a manos de su propio padre.

Los hechos ocurrieron en el estado de Jalisco, no obstante, por la naturaleza del caso y el actuar de personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) la historia de Gabriela Escamilla no tardó en viralizarse tanto en redes sociales como en los noticieros más populares del país.

Fue el pasado 09 de diciembre cuando la mujer de 53 años de edad fue detenida y le fue impuesta la medida cautelar de prisión preventiva, hecho que desató la furia de colectivos feministas que se unieron a su lucha y se manifestaron a las afueras de los juzgados de juicios orales del penal de Puente Grande.

La denuncia de abuso sexual de Gabriela Escamilla

Gaby denunció el presunto abuso sexual que padecía su sobrina (Foto ilustrativa)
Gaby denunció el presunto abuso sexual que padecía su sobrina (Foto ilustrativa)

De acuerdo con información obtenida por el medio El Universal, en enero de 2021 Gabriela se enteró que su sobrina, menor de edad que aún vive con sus padres, estaba siendo violentada sexualmente por su propio progenitor, es decir, el hermano de la denunciante.

Gabriela Escamilla se percató de las agresiones que sufría la menor luego de que la niña pasara una temporada en su casa, lo cual de forma casi inmediata encendió sus señales de alerta. Según las declaraciones que la mujer de 53 años brindó al mencionado medio de comunicación, su sobrina no solo era abusada sexualmente por su propio padre sino que la madre constantemente la golpeaba.

Fue la ropa interior de la pequeña, así como las lesiones que presentaba las que le revelaron a Gabriela Escamilla que la niña era víctima de abuso sexual por lo que a partir de ese momento optó por tomar cartas en el asunto e intentar proceder legalmente en contra de su propio hermano.

La detención de Gaby Escamilla

Héctor Pérez, abogado de Gabriela Escamilla al salir del penal de Puente Grande en Jalisco (Foto: Twitter/@OlimpiaCMujer)
Héctor Pérez, abogado de Gabriela Escamilla al salir del penal de Puente Grande en Jalisco (Foto: Twitter/@OlimpiaCMujer)

Luego de que su sobrina le confesara temerosa quién era su agresor, Gaby Escamilla optó por tomar un par de fotografías de los signos de violencia sexual que presentaba la menor con la finalidad de presentarlas como pruebas que sustentaran la denuncia que realizó ante la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGE) de Jalisco.

Desafortunadamente, el actuar de dicha dependencia fue omiso desde un inicio y la carpeta de investigación fue archivada, por lo que Gaby Escamilla se vio obligada a insistir para evitar la impunidad en el caso de su sobrina.

Dicha persistencia por reabrir el caso molestó al agente del Ministerio Público de dicha dependencia por lo que bajo amenazas y en represalia ordenó que la mujer fuera detenida por haber tomado la fotografía de prueba bajo el argumento de que violó la intimidad sexual de la menor.

El caso llegó hasta oídos de Olimpia Coral, activista feminista que impulsó una ley contra el acoso digital, quien reconoció la intención de Gaby Escamilla por ayudar a su sobrina, por lo que se sumó a la lucha para visibilizar el caso y ayudar a la mujer a recuperar su libertad.

Tras la presión mediática que recibió el caso, el apoyo de la activista y el trabajo de la defensa legal de Gabriela Escamilla, la mujer de 53 años fue puesta en libertad, no obstante, su hermano y presunto agresor de su sobrina continúa libre y la menor de edad en un constante riesgo.

“Ninguna mujer presa por denunciar” fue la consigna que ha definido el caso de Gabriela Escamilla, quien aseguró seguir en su lucha por obtener justicia ya no solo para su sobrina sino para ella misma.

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