Niños y mujeres embarazadas: las víctimas colaterales de la guerra interna del CDS en Sonora

El estado de Sonora es una zona codiciada por el narco debido a su posición prvilegiada: tiene más de 588 kilómetros de frontera con Estados Unidos, lo que lo vuelve una de las plazas más cotizadas para el tráfico de drogas y migrantes hacia EEUU, así como la entrada de dinero y armas.

La entidad y su paso fronterizo son tan codiciados que incluso se ha librado una guerra por el control del territorio entre las dos huestes principales del Cártel de Sinaloa: “La Chapiza”, por un lado, y la “Mayiza” por el otro.

La disputa criminal entre los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán y su compadre ha dejado una estela de ejecutados, balaceras y víctimas colaterales en las ciudades de Hermosillo, Caborca, San Luis Río Colorado, Guaymas, Empalme y Cajeme.

Producto de esta guerra, la semana pasada fallecieron dos niños a causa de balas perdidas, reportó Univisión. Uno fue alcanzado por un proyectil cuando jugaba en el patio de su casa en San Luis Río Colorado y el otro murió cuando iba a la tienda afuera de su casa en Cajeme.

De acuerdo con el medio estadounidense, en Guaymas una mujer embarazada también fue alcanzada por las balas pérdidas. Asimismo, al menos cuatro menores de edad han resultado heridos en distintos municipios de Sonora durante la semana anterior.

En el puerto de Guaymas, una mujer y una niña de tres años resultaron heridas cuando fueron ejecutados dos presuntos criminales en una zona donde convergen tres escuelas.

Mientras que al interior de los recintos escolares, por el sonido de las ráfagas de metralleta, los niños se resguardaron debajo de sus pupitres al tiempo que la maestra cantaba a todo pulmón para intentar calmar a los niños.

El fin de semana, el estado vivió una jornada violenta pues se registraron quemas de varios vehículos, negocios y establecimientos en los municipios de Guaymas y Empalme, lo que generó alerta entre los habitantes y provocó el despliegue de las fuerzas armadas.

Los disturbios se registraron en la noche del sábado 10 y domingo 11 de diciembre. Reportes preliminares indicaron que cerca de cinco comercios y tiendas de conveniencia fueron incendiadas por sujetos armados. Asimismo, se reportaron objetos ponchallantas en las calles de Guaymas y detonaciones de armas de fuego.

Entre los negocios a los que les prendieron fuego se encontraban varias tiendas Oxxo. Una de ellas se ubicaba en la calle 18 y Calzada, y otra en la colonia Termoeléctrica, ambas en Guaymas. Es por ello que incluso se reportó que al menos dos empleadas sufrieron crisis nerviosas y fueron atendidas por paramédicos de la Cruz Roja.

Medios locales señalaron que un vehículo fue incendiado (al parecer de manera intencional) en la colonia El Rastro, también en Guaymas, mientras que en la mañana de este domingo se reportó otra unidad bajo llamas en Lomalinda. Se presume que al interior del automotor se encontraba una persona sin vida.

Asimismo, una empresa de plásticos y resinas ubicada en la calle 20 en Guaymas también resultó afectada por los múltiples incendios. Integrantes del Cuerpo de Bomberos acudieron a los puntos señalados para sofocar el fuego, por lo que los negocios tuvieron que permanecer cerrados mientras se hacían las investigaciones correspondientes.

De acuerdo con las autoridades, siete “generadores de violencia” fueron detenidos en la noche del 10 de diciembre, mismos que podrían estar relacionados con el tráfico de drogas en los municipios donde se registraron los disturbios.

“Se investiga si estas detenciones están relacionadas con los incendios que se presentaron en Guaymas y Empalme”, detallaron las autoridades.

Estas acciones usualmente suelen ser estrategias de los cárteles para provocar que las autoridades tomen medidas contra sus rivales. Se trata de “calentar la plaza” para generar pánico y respuesta, ello a pesar de que implique víctimas colaterales.

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