Aparte de que la Casa de Modas Quetzalt es una empresa que ayuda a la comunidad LGBT+, también es sustentable con la naturaleza, ya que utilizan la piel de nopal en algunos de sus productos de moda.
De acuerdo con Tanya Mejía y David Ramírez, diseñadores de Quetzalt, mencionaron que al principio fueron a León a buscar las mejores pieles para poder emplearlos en sus diseños, probarlas y con el tiempo empezaron a usar otras cosas.
Y a partir de que habían sacado varias colecciones, también buscaron materiales sustentables del cual pudieran aprovechar y evitar la controversia del uso de las pieles animales.
“De alguna forma, nuestras pieles son de segundo uso porque, el animal primero se utilizó para la industria de la alimentación y con lo que sobró es lo que se utiliza para la marroquinería talabartería y elegí piel porque si es tardado el lienzo y es un modelo muy grande entonces no te lo pongo en un vinil que en tres meses se te va a romper, pelar y la piel me da el sustento de decir, al menos te garantizo tu bolso”.
Sin embargo, cuando ya empezaron a trabajar con la piel de nopal fue una alternativa para las personas “que no usan piel”.
“La piel de nopal, nosotros creemos, que nos da la elegancia, durabilidad de una animal, pero es como nuestra opción distinta. Este si es vegano, porque luego dicen que es una piel vegana sintética y no, porque entonces hablaríamos ya de plástico”.
“Hay mucho este juego de decir que es una piel, pero algunos lo disfrazan con plástico por su composición y aquí es diferente porque es la fibra del nopal con una mezcla de algodón”, detalló.
Es así cuando adquieren el lienzo, “es como si estuviéramos comprando una tela, hicimos unos desarrollos, los bolsos quedaron muy bonitos, vimos que fuera un material que se pueda trabajar para la marroquinería y así tuvimos la opción sustentable”, comentó.
Tanya explicó que sus bolsos tienen más aceptación tanto por lo económico y sustentabilidad con el medio ambiente y más en el extranjero, porque “ellos están conscientes que esto tiene un costo ya que no es masivo”.
Para que se realizara este trabajo de la piel de nopal se debió a la investigación realizada en Italia y con un fin de impactar el mercado internacional con el uso de este tipo de material, “y la gente lo demanda”.
“A pesar de que es un material, cuando ves el producto final y demás, creo que bien vale la pena también poder ser un poco más consciente como compradores, consumidores y dejar de generar tanto desperdicio”.
Al final, siempre recuerda a sus clientes de que la piel también es un medio sustentable, aunque no son productos de usar y desechar.
Algo que tiene como novedoso sus productos es que los tejidos utilizados son únicos, las personas creen que pueden ir a llegar al estado y hablar con las que venden los artesanos, pero cuando ven que es un diseño que es exclusivo de Quetzalt.
“Esto es una fusión de un trabajo de diseño, de un trabajo artesanal, para crear una pieza única de lujo artesanal”, lo resumió la diseñadora.
También señaló que hay “calidad en los materiales, pago justo a las artesanas por el trabajo que desempeñan, insumos nacionales y parte de nuestra filosofía es que la derrama económica se quede en el país porque somos los que necesitamos crecer y echar andar a esta economía”.
Los productos de Quetzalt tienen en todo su conjunto proveedores nacionales y razón por la cual hay pocas piezas en existencia, Tanya evita mandar un número alto por el tiempo que se tardan en hacer uno, a partir de tener todo el detalle por el cual el precio sube”.
Quetzalt es un negocio sin inversión y con medios propios, complicado para Tanya quien dijo que al trabajar así “en este país no es fácil”, finalizó.
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