Cuando uno va a realizarse una prueba de detección de VIH/SIDA llega a tener nervios. Piensa todas las posibilidades: positivo, negativo, una enfermedad de transmisión sexual (ETS), pero lo que más pasa por la mente de la persona va desde la muerte y el cargar el estigma.
Si a la persona le llega a salir positivo su resultado, la primera pregunta que tendrá será, y ahora ¿qué hago?
De acuerdo con la infografía que maneja el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), los doctores deben de valorar a la persona y brindarle el tratamiento adecuado, pero hoy en día hay usuarios que se quejan en redes sociales por la falta de atención que tienen con la comunidad.
Después de que la persona fue evaluada y haber pasado con un doctor, se le brindará a la persona apoyo de un psicológico, este proceso se recomienda ya que muchas personas cargan con el estigma negativo de lo que piensa la sociedad acerca de las personas con VIH/SIDA, ya que por muchos años fueron alejados e incluso se les negaba dar un abrazo o acercarse a ellos porque pensaban que se contagiaban, pero no es así.
Cuando el doctor tenga los estudios y sepa que la persona no tiene ninguna otra ETS, va a dar el tratamiento adecuado, que consiste en tres medicamentos (al menos) de antirretrovirales, mismos que debe ingerir tal y como se le indica el doctor.
La persona debe de ser muy comprometido con las tomas y respetar los horarios porque si uno lo deja por más tiempo puede ser que deba de ir con su médico para saber en qué situación se encuentra.
Se recomienda que no se tomen más de lo que señale el especialista, porque puede llegar a generar náuseas o incluso tenga efectos secundarios.
El problema con la entrega de fármacos es que varios activistas han mostrado que el sector salud hacen falta muchos medicamentos e incluso se habló de un posible desabasto, impidiendo que de las 240 mil personas con VIH en México, algunos no tengan sus dosis recetadas por el doctor.
El activista Alaín Pinzón había mencionado que a pesar de que la secretaría de salud está atestada “a mí me vale, es algo que necesita la gente. Si tiene viruela símica, VIH y no está en control, necesita atención médica. Si no hay camas ese es su problema, a mí no me interesa y a nadie nos debería de interesar esto”.
A pesar de que la infografía del IMSS dice que “hoy en día no hay cura”, los tratamientos pueden ayudar a quienes son detectables pueden ser intransmisibles todo gracias a las medicinas que pueden ayudar a muchos como Biktarvy, medicamento de la viruela, Dolutegravir, penicilina, Tremixclar o Goltrec.
Además de los medicamentos, se pide a quienes están en tratamiento que tengan una dieta balanceada, evitar fumar, consumir alcohol o drogas y hacer 30 minutos diarios de ejercicio.
Según datos del Dr. Roberto Santos, director Médico de Kabla, van 111 mil fallecidos por esta enfermedad, en el cual señala que “la disponibilidad de medicamento, calidad en servicios, pruebas y acciones preventivas son los principales retos alusivos a esta pandemia, cuya tasa de mortalidad es de 4.2 defunciones por cada 100 mil habitantes”.
Las personas que no tengan IMSS pueden asistir a la Clínica Condesa o México Vivo (CDMX), SETAC (Puerto Vallarta) y Checcos o Coesida (Guadalajara).
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