Durante las primeras horas de este miércoles 30 de noviembre, se dio a conocer la muerte de Federico Silva, artista mexicano, escultor e investigador de la Coordinación de Humanidades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La noticia se difundió por medio de redes sociales, pero fue confirmada por la cuenta de Twitter del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, quien compartió que se hará un homenaje póstumo en acuerdo con la familia en el Palacio de Bellas Artes.
De igual forma, el gobernador del estado de San Luis Potosí compartió una esquela en donde lamentó el fallecimiento del artista al cual reconoció sus aportaciones a la cultura mexicana.
“Lamentamos el sensible fallecimiento del escultor Federico Silva. Agradecemos sus enormes contribuciones al arte y cultura de San Luis potosí y deseamos a todos sus seres queridos una pronta recuperación”, compartió Ricardo Gallardo Cardona.
Sin embargo, no se dieron a conocer las causas del fallecimiento del aclamado escultor, quien el pasado 16 de septiembre cumplió 99 años.
Federico Silva nació a mediados de septiembre de 1923 en la Ciudad de México y fue un artista autodidacta que se desempeñó en las técnicas de encáustica, frescos y temple, de acuerdo con la biografía del museo que lleva su nombre. Además destacan sus esculturas en piedra y metal.
Realizó estudios de medicina, veterinaria, derecho y antropología pero finalmente se decantó por el arte. Fue ayudante del reconocido artista David Alfaro Siqueiros quien lo invitó a ser su ayudante y colaboró en el mural Nueva Democracia ubicado en el Palacio de Bellas Artes.
Gracias a este acercamiento logró codearse con artistas de alto calibre de la época como el muralista Diego Rivera, el grabador Leopoldo Méndez, el pintor Pablo O`Higgins y el escritor José Revueltas, quienes terminarían influyendo en sus inclinaciones artísticas.
Tras viajar a Europa, a partir de 1950, pintó los murales del Instituto de Capacitación de la Secretaria de Educación Pública y otro en el Instituto Politécnico Nacional, titulado la Técnica al Servicio del País.
Estos se caracterizaban por un estilo apegado al realismo que iría abandonando como el mural Historia de un espacio matemático para la Facultad de Ingeniería de la UNAM en 1981 o el de la cueva de Huites (que inició en 1992 y terminó cuatro años después), donde hace uso de figuras geométricas abstractas.
Ya para la década de los 1960, tras una exposición en la Universidad Obrera, se adentró en el arte cinético y la escultura con madera, aluminio, acero, cemento, fierro y piedra.
Entre sus obras destacan los Hombres rupestres de 1985 en San Luis Potosí; la escultura Guerra florida, hecha en 1996 y puesta en el Centro de Enseñanza de Idiomas de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán, entre otras.
Para 1985, se estableció en Amaxac de Guerrero en el estado de Tlaxcala y transformó la ex fábrica de hilo la Estrella en su taller donde realizaab todo tipo de esculturas. En 1995, recibió el Premio Nacional de Ciencias y Artes, distinción más importante por parte del Gobierno de México a los artistas.
Finalmente en 2010 recibió un Doctorado Honoris Causa por parte de las universidades de San Luis Potosí y la Nacional de México. Seis años después recibió la Medalla de Bellas Artes.
Además, el pasado 8 de noviembre fue nombrado como creador emérito en el arte contemporáneo nacional por el Congreso Local de Tlaxcala a propuesta de la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología.
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