Un bar, un departamento y un taxi: los enigmas en el presunto feminicidio de Ariadna Fernanda López

Amistades y familiares de la joven exigieron justicia para que el caso no quede impune

Guardar
Ariadna, víctima de un presunto
Ariadna, víctima de un presunto feminicidio, fue despedida esta noche en una funeraria de la colonia Doctores, en la CDMX. (Foto: Cuartoscuro)

Ariadna Fernanda López Díaz fue vista por última vez el domingo por la noche, luego de haberse reunido con un grupo de amigos. Su cuerpo sin vida fue hallado por ciclistas que viajaban desde la Ciudad de México con rumbo a Tepoztlán, cerca de la curva conocida como La Pera, en la carretera México-Cuernavaca.

Gracias a la difusión de algunas imágenes sobre los tatuajes de la joven, sus amistades y familiares pudieron identificarla. Su cuerpo fue trasladado este jueves 3 de noviembre a una funeraria de la colonia Doctores, de la CDMX, en donde fue despedida entre llanto, abrazos y flores.

Hasta el momento, la muerte de Ariadna Fernanda ha estado rodeada por un sinfín de incógnitas, ya que las versiones sobre sus datos y las circunstancias en las que habría desaparecido no coinciden entre sí.

En un primer momento se habían difundido versiones en las que se aseguraba que la joven tenía 22 y 35 años. Sin embargo, de acuerdo con Sara Inés Martínez, una de las amigas cercanas de Ari, como la llamaban, ella tenía 27 años.

“No estaba en un bar”

Otras narraciones preliminares sobre el caso señalaron que Ariadna habría abordado un taxi al salir de un bar en la colonia Condesa de la CDMX, lo cual también quedó en entredicho luego de recientes declaraciones.

“No estaba en un bar, estaba en casa de unos supuestos amigos en la colonia Condesa. Habían ido a un bar y se fueron al domicilio”, especificó Sara, quien habría monitoreado la ubicación de Ariadna en tiempo real aquella noche.

Al respecto, Rautel Astudillo, quien se identificó como el dueño del departamento donde habría estado la joven, reconoció que ella y otros amigos se reunieron el domingo 31 de octubre.

Ariadna Fernanda tenía 27 años
Ariadna Fernanda tenía 27 años y trabajaba en un restaurante del Centro de la CDMX. (FOTO: ROGELIO MORALES /CUARTOSCURO.COM)

De acuerdo con sus declaraciones, inicialmente se encontraron en el Fisher’s Cibeles, ubicado en la calle Durango de la colonia Roma Norte. Vanessa, novia de Rautel, habría sido quien invitó a Ariadna a la fiesta.

“[Estábamos] primero en un bar, Fisher’s Cibeles, y de ahí fuimos a mi departamento [...] Ella solita se fue, los mismos invitados que estaban en el bar fueron a mi casa. De ahí nos fuimos temprano y ahí fue donde yo perdí comunicación con ella”, detalló en un encuentro con medios de comunicación.

Las versiones sobre qué ocurrió cuando Ariadna abandonó el departamento son inciertas, pues hay quienes afirmaron que tomó un taxi en la calle, mientras otras personas señalaron que solicitó transporte por medio de una aplicación.

Ante la falta de respuesta de Ariadna en las horas y días siguientes, Sara se comunicó con las personas que habrían tenido un último contacto con ella, pero la respuesta que recibió fue no tenían noticia alguna. “No, no sé nada, todo bien”, le contestaron.

Familiares y amigas de Ariadna
Familiares y amigas de Ariadna aseguraron que lucharán hasta que se haga justicia. (FOTO: ROGELIO MORALES /CUARTOSCURO)

Rechazaron las primeras versiones de la Fiscalía

Ricardo, uno de los tíos de Ariadna, señaló que la causa de muerte de la joven de 27 años habría sido asfixia por ahorcamiento. Por su parte, las autoridades determinaron de manera preliminar que ella habría fallecido por ahogamiento con su propia saliva, según comentaron sus amigas y personas cercanas a ella, quienes también denunciaron que el cuerpo tenía huellas de violencia.

Que busquen a ese desgraciado que la mató, o los que hayan sido”, exigió Ricardo.

“No es real, porque cómo se va a ir de aquí [de la CDMX] a allá [Tepoztlán] ahogada, ¿o cómo? ¿Y golpeada? Porque en las fotos que se viralizaron aparece que tiene golpes en el cuerpo. A lo mejor los de la cara no se ven, pero sí tiene golpes también en la cara”.

Ariadna tenía un hijo de siete años y trabajaba en un restaurante del Centro de la capital. Hoy su familia y amigas le dieron el último adiós y aseguraron que no dejarán de luchar hasta que se haga justicia.

“Pedimos justicia, exigimos justicia porque Ari la merece, porque la forma en la que murió no se la merece absolutamente nadie. Que sepan que no vamos a parar, tengamos que romper lo que tengamos que romper, tengamos que ir a donde tengamos que ir”, sentenció su amiga Sara.

SEGUIR LEYENDO

Guardar