Una llamada anónima en la que se alertaba la presencia de personas armadas llevó a que la Fiscalía General de la República (FGR) asegurara un inmueble donde se construía un ducto en la frontera entre Mexicali, Baja California, y Calexico, en California, Estados Unidos.
En un primer momento fueron elementos de la Fuerza Estatal de Seguridad Ciudadana quienes acudieron al predio ubicado en la calle Aguascalientes de la colonia Fronteriza, según el Informe Policial Homologado (IPH).
En tanto, el Ministerio Público de la Federación inició una carpeta de investigación y solicitó a un juez de distrito una orden de cateo, la cual fue otorgada el pasado viernes 28 de octubre. Fue así que personal de la Policía Federal Ministerial (PFM) de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) inspeccionaron el inmueble en cuestión.
En el lugar se encontraron dos máquinas para perforar, manguera, dos cargadores para armas de fuego, nueve cartuchos útiles, un vehículo y una diversidad de utencilios para operar la maquinaria.
A pesar de que hasta el momento no se ha logrado identificar a los presuntos responsables del ilícito, el lugar fue asegurado por el MPF, mientras los peritos en matería de crimonología y arquitectura realizan las pruebas periciales correspondientes.
En las imágenes compartidas por la FGR se aprecia el terreno de paredes blancas cubiertas con una especie de malla morada. A lo largo de la finca está esparcida la maquinaria para la construcción del ducto.
A pesar de que las autoridades no detallaron los posibles usos y fines del ducto, medios locales han indicado que presuntamente podría ser ocupado para transportar paquetes de drogas hacia el país vecino, en un mecanismo similar al de algunos supermercados que envían dinero en efectivo mediante cápsulas.
Desde días antes se había reportado que una supuesta iglesia cristiana servía como fachada del inmueble, pues en el lugar había una lona con el nombre de una corporación religiosa. Se desconoce cuánto medía el ducto, pero el predio se ubica a menos de 100 metros de la frontera con Estados Unidos.
De manera extraoficial se indicó que tras las lluvias registradas en Calexico se generó un socavón que fue revisado por los oficiales estadounidenses, el cual se hizo más profundo al momento de escarbar, aunque esto no ha sido confirmado por las autoridades mexicanas.
En mayo pasado se dio a conocer un “narcotúnel” en Tijuana, el cual presuntamente era utilizado para el trasiego de drogas hacia San Diego, California. La construcción fue encontrada en una casa de una planta ubicada en la zona industrial de la ciudad fronteriza, por lo que pasaba desapercibida por los vecinos.
Este túnel estaba más “sofistificado”, pues medía medio kilómetro de longitud y contaba con energía eléctrica, rieles, vigas metálicas de soporte y ventilación. De acuerdo, con el fiscal federal en San Diego, Randy Grossman, la construccíon se extendía a lo largo de 532 metros y de 1,2 metros de diámetro, además de que se encontraba a 19 metros de profundida.
Por estos hechos fueron detenidas seis personas, de las cuales cuatro iban a enfrentar cargos de conspiración para el tráfico de 793 kilogramos de cocaína, mientras que las dos restantes por 74 kilos de metanfetaminas y 1,6 kilos de heroína.
De 2006 a la fecha, se han encontrada al menos 15 túneles en la frontera entre California y México, principalmente en la zona industrial de Otay.
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