Omar Fayad Meneses, exgobernador de Hidalgo, reapareció públicamente y, pese a los rumores de una posible incorporación al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), anunció que buscará encabezar el Consejo Político Estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), además de no descartar el puesto de Alejandro Alito Moreno Cárdenas o la candidatura a la Presidencia de la República.
“No me voy a descartar para el cargo de dirigente nacional del PRI y tampoco me voy a descartar para competir por la candidatura presidencial del PRI para el próximo proceso electoral federal”, fueron las palabras que mencionó; sin embargo, indicó que primero trabajará por Hidalgo.
Fue el pasado lunes 31 de octubre cuando el exmandatario indicó que su principal objetivo es que la militancia recupere espacios en el tricolor, por lo que la principal apuesta será la democratización del instituto.
Ante los cuestionamientos de la prensa, indicó que su partido debe resurgir de las cenizas como ave fénix y levantar el vuelo con el fin de que la población crea nuevamente en las propuestas, planes de trabajo, así como en los cuadros priistas que buscan conformar un mejor instituto.
“El PRI debe volver a levantar el vuelo, claro que se puede, ésta no es la primera derrota del partido, la derrota histórica más dura fue en el 200 ¿Y qué ocurrió después? El PRI resurgió, se levantó, la gente volvió a creer en él”, expresó ante los medios de comunicación que se dieron cita.
Asimismo, explicó que la derrota del pasado mes de junio donde el partido perdió la gubernatura de Hidalgo no ha sido “el fracaso” más grande que se ha tenido como organización política, puesto que recordó que fue en el 2000 cuando el Revolucionario Institucional se enfrentó a ser oposición en un país que había gobernado desde su creación en los años veinte del siglo pasado.
Aunado a lo anterior, indicó que la derrota del pasado mes de junio debe de ser un impulso para recuperar la entidad con trabajo, pues refirió que una de las principales características del PRI es el trabajo a favor de la militancia.
“Entonces, aquellos que en cuanto ven el primer ventisco se quieren bajar de la embarcación, porque tenemos una primera derrota, entonces no saben lo que es un partido, no lo aman, no lo quieren, no saben lo que es la democracia, no saben lo que son los procesos políticos”
Por otro lado, volvió a insistir en la necesidad de que los procesos democráticos sean un pilar del tricolor, ante lo cual instó a que no se dé un “agandalle”, es decir, que la dirigencia nacional no intervenga en el proceso y solo sea la militancia quien tome la decisión.
“Hoy el PRI se debe de democratizar. Yo espero que no haya ningún agandalle, no le sería útil a nadie un agandalle, lo que en este momento es útil es volver a democratizar los procesos y el problema que traemos en el nacional es precisamente eso, por eso hay tantas diferencias entre las facciones”, expresó.
Finalmente, dijo que su objetivo será tener apertura hacia todas las posturas que están dentro del partido, por lo que seguirá con sus intenciones de trabajar por una reestructuración del PRI, pues recalcó que con trabajo duro se podrá volver a poner en lo alto de la política mexicana al partido.
Su reaparición se dio semanas después de que se le vio salir de Palacio Nacional, en el cual se reunió con el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), aunque hasta el momento se desconoce el motivo que juntó a los políticos.
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