En el IV Foro Latinoamericano sobre VIH e ITS 2022 que se realiza en Lima, Perú, el defensor de derechos humanos Alaín Pinzon retrató la difícil situación que pasa en México con respecto a la viruela símica y la lucha contra el VIH.
El doctor Jorge Saavedra fue quien propuso a este internacionalista para que mostrara la problemática homofóbica en la institución de Salud.
“Es un gusto estar aquí, desafortunadamente con un tema que en México nos ha llevado a lugares totalmente desconocidos, no solo para hombres que tenemos sexo con hombres (HSH), sino también para la sociedad civil, sobre todo en la respuesta o lucha contra el VIH”, mencionó.
En su presentación señaló el primer caso de viruela del mono en México, y las deficiencia del estado al no contar con la vacunación necesaria para las personas que están contagiadas en el país.
En el informe técnico de viruela símica emitido ese mismo día, el 25 de octubre del 2022, por la Secretaría de Salud mexicana, se identificaron 4 mil 471 personas que “cumplen con la definición operacional de casos probables de los cuales dos mil 654 fueron confirmados, 377 en estudio y 1440 descartados mediante prueba de laboratorio”.
La pandemia inició con un estigma y a partir de que se comunicó que los Hombres que tienen Sexo con otros Hombres (HSH) “el gobierno mexicano actuó tarde, su omisión es grave, hace apenas un par de semanas sacaron materiales que pudiesen informar a las poblaciones mayores afectadas que en este caso somos los (HSH)”, señaló.
Aclaró que estos informes e infografías salieron cinco meses después del primer caso reportado.
“Tarde llegan esos materiales de difusión cuando fuimos las organizaciones de la sociedad civil y los activistas y aquellos que fuimos a los lugares de encuentro sexual, cuartos oscuros y a los vapores a pegar información con los síntomas posible de la viruela símica”, advirtió.
La información llega tarde, siendo que la primera población que empezó a afectar fue a hombres homosexuales “donde el subregistro en México va de cinco a seis meses más, reportado por la secretaría de salud mexicana”.
Señaló que las organizaciones que trabajan en apoyo al VIH/SIDA han recibido casos desde que inició junio, el mes del orgullo en México.
Muchos de estos no han sido atendidos por ninguna institución de salud pública en México porque fueron diagnosticados “por viruela normal”, esa que fue erradicada hace 72 años en el país, confirmó.
Además de esta enfermedad se reportaron casos de salmonela, efectos secundarios de algún medicamento “ante las lesiones típicas y claras de la viruela símica”.
Advirtió Alaín Pinzón que México es como una olla de presión, “en donde puede estallar en cualquier momento. La última protesta el viernes pasado con un subregistro con más de 12 mil casos sin laboratorios que nos den el diagnóstico confirmatorio y por lo tanto acceder a nuestras incapacidades sin entregar a nuestros empleos a tiempo, ante la perdida de nuestras fuentes de trabajo y el desequilibrio económico que provoca quedarse aislado durante cuatro semanas”.
La homofobia y el estigma está presente en las instituciones y para ello el defensor de derechos humanos señaló que existe en la secretaria de salud mexicana y en el subsecretario Hugo López-Gatell “al decir que están analizando la eficacia de una vacuna que se está adquiriendo en países como Perú, EEUU, Canadá, Países Bajos, Brasil, Chile y desde ayer El Salvador”.
Asimismo, acusó que probablemente México se encuentre con una “persona antivacunas”, además de recordar que no solo la población mayormente afectada sean los HSH, sino cualquier persona la puede obtener.
La realidad estadística hace referencia que los HSH tienen la mayor taza de casos reportados “y vamos en incremento en muchos países de América Latina”.
Uno de los ejemplos que presentó Alaín fue el “¿qué pasaría si un adolescente tiene cráteres en la cara y tiene miedo a que lo corran de su casa porque en su familia no saben que tiene una vida sexual activa?”, al igual se pregunta una persona que vive con amigos, dando a entender que la institución de gobierno no está ahí y solo las organizaciones y activistas dan la cara por ellos.
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