El gobierno de los Estados Unidos instó este miércoles al Ejército de México a respetar los derechos humanos cuando asuma tareas de seguridad pública, debido a que el Congreso está muy cerca de aprobar la extensión hasta 2028 la presencia de los militares en las calles del país.
Y es que un alto funcionario de la Administración de EEUU señaló a la agencia EFE que lo importante no es que los militares ejerzan de policías, sino que respeten los derechos humanos.
“No importa qué agencia esté encargada de la seguridad, lo importante es que las agencias responsables respeten los derechos humanos y que, cuando haya infracciones, se rindan cuentas”
La misma fuente aseguró que “la promoción de los derechos humanos es importante para el Gobierno de Estados Unidos” y es algo que aborda “regularmente con los gobiernos de la región”.
Amnistía Internacional y decenas de organizaciones enviaron este miércoles una carta a los Gobiernos de Estados Unidos y México para expresar su preocupación por el despliegue militar en territorio mexicano, ante la ola de violencia provocada por el crimen organizado.
Sobre el ciberataque y la reciente filtración masiva de correos de la Secretaría de Defensa (Sedena) por parte de los hacktivistas Guacamaya, que han sido publicados por la prensa, el alto cargo del Gobierno de Joe Biden dijo que Estados Unidos mantiene un diálogo tan amplio con sus socios que ya prevé que “alguna información sea filtrada” a veces.
“Lo que nos preocupa es si habrá impacto a la seguridad de nuestro personal o a las operaciones contra el crimen organizado”, añadió la fuente, quien sostuvo que EEUU debe “trabajar” más con sus aliados para proteger la información.
Estados Unidos y México mantendrán este jueves en Washington D.C. una reunión de alto nivel sobre seguridad, que estará presidida por el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, y por el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard.
En ese encuentro, aseguró el funcionario estadounidense, la “principal prioridad” será la reducción de la producción, tráfico y consumo de drogas sintéticas, especialmente el fentanilo.
También se abordará el tráfico de armas hacia México, un asunto que el Gobierno mexicano ha puesto sobre la mesa al denunciar a empresas armamentísticas de Estados Unidos por vender armas al crimen organizado.
En otra rueda de prensa, el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, aseguró que Blinken y Ebrard tratarán también “el desafío” de los flujos migratorios en la región.
En los últimos 11 meses, EEUU ha arrestado a dos millones de personas que cruzaron la frontera con México, una cifra récord liderada por el aumento de migrantes provenientes de Venezuela, Cuba y Nicaragua.
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