Durante la época colonial, llevada a cabo entre los siglos XVI y comienzos del XIX, el nombre de México cambió por el de “Nueva España”, ya que era uno de los territorios que conformaban al imperio español, por lo cual el territorio mexicano se dividió en reino y provincias.
En el virreinato, a los reinos se les consideraba como unidades corporativas, por lo tanto, no tenían que responderle al virrey, pero sí tenían que rendirle cuentas a la Casa Real de España.
En otros territorios que estaban bajo el dominio del imperio español, se les nombro como “Reinos”, un ejemplo de ello son los casos de Guatemala y de Filipinas.
En cuántos reinos se dividió México
El territorio mexicano se fraccionó en cuatro reinos: Nuevo Reino de Galicia, Nuevo Reino de Vizcaya, Nuevo Reino de León y Nuevo Reino de México, para los cuales existieron provincias, como en el caso de Nuevo México y Texas, los cuales actualmente le pertenecen al vecino del norte, Estados Unidos.
Nuevo Reino de Galicia
Su fundación se realizó con el patrocinio regiomontano con la intención de compensar el creciente poder del bando de Hernán Cortés en el centro y sur de Mesoamérica. El territorio que comprendía eran los actuales estados de Jalisco, Nayarit, Aguascalientes y Zacatecas.
La capital del reino en cuestión fue la sede de Real Audiencia de Guadalajara y en cuanto a su jurisdicción eclesiástica, los territorios anteriormente mencionados fueron dependientes del obispado de Guadalajara.
Nuevo Reino de Vizcaya
Se trata de la primera provincia en ser explorada y fundada en el Norte de México durante el Virreinato de la Nueva España, ocupó el área actual de Durango, Chihuahua y parte del estado de Coahuila.
Durante 1812, las provincias recibieron la constitución liberal concedida a las colonias por España, con la pequeña posibilidad de poder convertirse en Audiencias, sin embargo la constitución fue dada de baja poco después por el Virrey y Nueva Vizcaya se las habría arreglado para escoger a un representante en las cortes hasta su renacimiento en 1820, en el que establecieron una asamblea y delegaciones provinciales.
Nuevo Reino de León
Fue políticamente gobernado y dependiente de la Intendencia de San Luis Potosí y del Virreinato de la Nueva España. Su ubicación se encontraba en el área que corresponde al actual estado de Nuevo León.
Durante un tiempo permaneció aislado, ya que la comunicación era afectada por la distancia con las principales poblaciones de la Nueva España, puesto que los caminos y fronteras en algunos casos no estaban totalmente definidos, por lo tanto, la provincia funcionó de forma autónoma en gran parte de su historia.
Posteriormente se integró con las provincias vecinas, con las que tenía mayor facilidad de comunicación, formando la semiautónoma Comandancia General de las Provincias Internas.
Con el paso del tiempo formó parte de las Provincias Internas de Oriente, junto con las de Coahuila, Nuevo Santander y Texas. Su disolución se presentó en 1821 provocada por la independencia del Imperio Mexicano.
Nuevo Reino de México
Fue políticamente gobernado por el Virreinato de Nueva España desde 1535, contó con las subdivisiones en las provincias de México, Puebla, Oaxaca, Veracruz, Michoacán y Guerrero.
Durante la vigencia de la Constitución de 1812, México, como los demás reinos de Indias, fue incorporado al Reino de las Españas, con su representación otorgada por la constitución, en la que se estableció a la Provincia de Nueva España en su lugar.
SEGUIR LEYENDO: