En ocasiones, lo que puede comenzar como una celebración puede terminar en una tragedia, como sucedió en la alcaldía Milpa Alta de la Ciudad de México, donde falleció un joven por manipular pirotecnia mientras participaba en una fiesta religiosa.
El hombre se encontraba en el festejo patronal de San Agustín Ohtenco, celebrado el 28 de agosto de cada año, donde se ofrece comida tradicional como arroz, mole y tamales para las personas que lleguen a visitar al Santo patrono.
Y, como es costumbre en este tipo de festividades, también se suele llevar a cabo un espectáculo de juegos pirotécnicos. Fue así que un joven decidió ir a la fiesta con un paquete de este tipo de artefactos explosivos en su mochila, con el fin de activarlos por su propia cuenta, según los reportes preliminares.
Sin embargo, mientras iba transitando en la avenida España y Prolongación Guanajuato en la colonia San Jerónimo Miacatlán, la pirotecnia que llevaba consigo explotó de manera accidental y le provocó múltiples lesiones en su cuerpo, ocasionando pánico entre los pobladores.
De manera inmediata se dio aviso a las autoridades locales y los servicios de emergencia arribaron al lugar para atender dicho siniestro. A pesar de que personal de la Unidad de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la CDMX trasladó al joven a un hospital para recibir atención especializada, momentos más tarde perdió la vida.
Los hechos se reportaron después de las 13:00 horas del domingo 28 de agosto a través de las redes sociales de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos. A pesar de que no se dieron mayores detalles sobre lo ocurrido, de manera extraoficial se señaló que el ahora fallecido tenía 23 años de edad aproximidamente.
“En Av. España y Prolongación Guanajuato, col. San Jerónimo Miacatlán, lamentablemente, un hombre perdió la vida a causa de la incorrecta manipulación de pirotecnia durante festejos religiosos en la zona”
Por lo anterior, usuarios en redes sociales mostraron su inconformidad ante el uso de juegos pirotecnicos durante este tipo de celebraciones, además de señalar las repercusiones en el medio ambiente y los animales domésticos. “Solo hacen ruido contaminación y alteran los nervios”, “las fiestas pueden continuar sin esto por el bien de todos”, “los cohetes deben prohibirse definitivamente de las fiestas patronales”, eran algunos comentarios de los internautas.
Y es que cuando hay pirotecnia de por medio, los accidentes no suelen faltar. Cabe recordar que a mediados de agosto se registró una explosión en una bodega clandestina en la que se almacenaban este tipo de explosivos, la cual estaba ubicada en la colonia La Lupita de la alcaldía Tláhuac.
Por este percance se reportaron dos personas lesionadas: un hombre de 58 años que presentó quemaduras en el tórax, y una mujer de 56 años que tuvo que se trasladada en helicóptero a un hospital para recibir atención médica, pues tenía una fractura en ambas piernas y quemaduras de tercer grado.
Algo similar se reportó el pasado 25 de agosto en Querétaro, donde una vivienda ubicada en la colonia Casa Blanca de la capital se vio cubierta en llamas tras registrarse una explosión. De acuerdo con habitantes de la zona, el inmueble era utilizado para el almacenamiento y venta de pirotecnia.
La Coordinación Municipal de Protección Civil detalló que un hombre resultó con quemaduras de segundo grado; sin embargo, descartó riesgos para las casas aledañas o la ciudadanía en general.
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