Este lunes 22 de agosto, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), durante la ceremonia de Reinauguración del Recinto Parlamentario 1857 en Palacio Nacional, congregó a las llamadas “corcholatas”, esto de cara al proceso interno de selección de precandidato en Morena para las elecciones presidenciales de 2024.
Los lugares de honor estuvieron repartidos de la siguiente manera: al centro de la primer fila, AMLO; a la derecha del presidente, Olga Sánchez Cordero, presidenta de la Mesa Directiva del Senado de la República; y a la izquierda del mandatario, la doctora Beatriz Gutiérrez Müller.
En la fila de atrás y de izquierda a derecha estuvieron Adán Augusto López Hernández; titular de la Secretaría de Gobernación (Segob); Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México; Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE); y Sergio Gutiérrez Luna, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados.
El recinto se construyó entre 1825 y 1829 para albergar al Poder Legislativo del México Independiente y el diseño estuvo a cargo del arquitecto Luis Zapari. Hasta 1872, año en que fue devastado por un incendio, fungió como sede de la Cámara de Diputados.
La única ponente durante el evento fue Olga Sánchez Cordero, quien señaló que es un triple honor estar en la ceremonia de reinauguración. En primer lugar, resaltó el valor histórico del lugar; en segundo plano, manifestó su congratulación al acudir en su calidad de mujer; finalmente, en tercer lugar, se congratuló de participar de este proyecto que forma parte de la Cuarta Transformación (4T).
De tal modo que en esta ceremonia sobresalen dos elementos; el primero de ellos es el simbólico, como muchos otros a lo largo de la administración de López Obrador, donde se hace referencia al nacimiento del Estado mexicano y el surgimiento de un poder democrático en el siglo XIX.
Asimismo, existió un elemento político electoral en el evento, pues a la ceremonia no acudió Ricardo Monreal, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado de la República y líder de la bancada de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en la Cámara Alta.
Y es que de cara a los procesos electorales de 2024, donde se definirá la presidencia de México, AMLO señaló que sus favoritos son López Hernández, Sheinbaum Pardo y Ebrard Casaubón; sin embargo, al interior de la 4T, existen otros perfiles que han manifestado su interés por ser el sucesor del mandatario federal.
Se trata de Ricardo Monreal y Gerardo Fernández Noroña, diputado por el Partido del Trabajo (PT). Cabe destacar que ambos cuentan con un apoyo popular que rivaliza con, al menos, una de las llamadas “corcholatas” presidenciales.
Esto porque de acuerdo con la casa encuestadora CE Research, los legisladores tienen más popularidad electoral que el secretario de Gobernación. Ya que en una publicación de junio, se estimó que Adán López tiene una intención de voto del 7%, mientras que la de Monreal está en el 11% y la de Noroña está en 8%; sin embargo, la popularidad de la jefa de Gobierno y del canciller están por las nubes, ya que ellos cuentan con una posible captación de los votos que rebasa el 30%, de hecho, la del titular de la SRE es casi del 40 por ciento. Esto porque Marcelo Ebrard tiene el 39% y Claudia Sheinbaum tiene el 35% de captación de sufragios.
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