Activistas y organizaciones civiles solicitaron apoyo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para que se reconozca la situación de conflicto interno violento en México y se tomen medidas inmediatas.
En el acto, que tuvo lugar frente al Museo de Memoria y Tolerancia (MyT), ubicado en el centro de la capital, se reunieron activistas como Kenya Cuevas, fundadora de la Casa de las Muñecas Tiresias; Cecilia Patricia Flores, de Madres Buscadoras de Sonora; Renata Villarreal de Marea Verde, y Bryan LeBaron, familiar de los mormones masacrados en noviembre de 2019 en el noroeste mexicano.
“Si no llamamos las cosas por su nombre, si no tenemos el diagnóstico correcto, nunca va a ser un éxito la estrategia”, dijo el activista LeBaron durante la conferencia, en la que reclamaron que las acciones son urgentes ante el aumento de la violencia en los últimos años pero especialmente en las últimas semanas, en actos que calificaron como de terrorismo.
“Los grupos armados ilícitamente que se oponen y confrontan con el Estado mexicano se han diversificado, han ido incrementando con el tiempo su poder armamentista, económico y social, y se han apoderado de gran parte del territorio que comprende la nación, pues según lo reportado en el estudio realizado por Congressional Research Service entre 30% y 35% es un ‘espacio no gobernado’, es decir, ausencia del estado de derecho mexicano”, expresaron los activistas en la carta enviada a la ONU.
Asimismo, solicitaron que se declare formalmente que el Estado mexicano atraviesa por un conflicto armado interno, “con la finalidad de que se materialicen los fines de la ONU, que acompañe, promueva, vigile y coopere para que los grupos armados ilícitos sean juzgados (...) para alcanzar la estabilidad interna y evitar mayores pérdidas humanas”.
Autoridades mexicanas reportaron este lunes la detención de 3 mil 630 personas en un fin de semana marcado por actos públicos violentos del crimen organizado en diversas entidades del país, aunque negaron que exista terrorismo.
Por su parte, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, cuestionado directamente en la habitual conferencia de prensa matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, sobre si los hechos violentos de los últimos días eran un acto de terrorismo, fue enfático al reiterar que solo fueron actos “propagandísticos” de los grupos delincuenciales.
“No son atentados terroristas, no hay que magnificar los hechos, no debe de verse más allá de la propaganda”, enfatizó.
Asimismo, aseveró que la estrategia de seguridad en México “está dando resultados” y apuntó que el próximo 20 de agosto se presentarán los datos que demuestran cómo la incidencia delictiva “está a la baja”.
Al ser cuestionado por los parámetros internacionales que indican que los hechos ocurridos en Baja California podrían calificarse como actos de terrorismo, el titular mencionó que no es así; sin embargo, fue señalado de querer minimizar los hechos.
“No, no es que queramos minimizarlos, pero desde luego hay una estrategia del gobierno federal en el combate a la inseguridad que está dando resultados, ya verán ustedes, conocerán las cifras el próximo día 20, hay una baja en la incidencia delictiva, pero cuando se combate a la inseguridad, no estamos exentos de que haya reacciones”, declaró.
Mientras que Andrés Manuel López Obrador dijo que tanto la oposición como los medios de comunicación están “exagerando” con respecto a los hechos, al tiempo que aseguró que existe gobernabilidad en el país.
Cabe recordar que fue el pasado 9 de agosto cuando se presentó una ola de violencia y narcobloqueos en Guanajuato y Jalisco, tras un enfrentamiento entre elementos del ejército y narcotraficantes. Luego, el jueves 11 y viernes 12 de agosto se vivió una jornada violenta que azotó Ciudad Juárez, Chihuahua (que dejó 11 personas muertas, entre ellas una mujer embarazada y un menor de edad) y en los municipios de Tijuana, Ensenada, Rosarito, Tecate y Mexicali, en Baja California.
Con información de EFE
SEGUIR LEYENDO: