Luego de darse a conocer el derrumbe en una mina de Sabinas, estado de Coahuila, fue el gobernador priista Miguel Riquelme, quien actuó de manera inmediata para comenzar los trabajos de búsqueda y rescate de 10 trabajadores atrapados.
Además, se ha sumado día con día a la reunión de coordinación para dar seguimiento a las labores, donde participan también los tres órdenes de Gobierno, incluido el Ejército y la Guardia Nacional, y fue él mismo quien recibió al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
También se le ha visto en atención a las familias de los mineros a quienes intentan rescatar sin descanso, pues las involucra en las reuniones para darles información puntual sobre los avances en la zona del desastre.
“Lamento el accidente ocurrido el día de hoy en un pozo de carbón camino a Las Conchas, en la Región Carbonífera, en Agujita, municipio de Sabinas”, fue su publicación inmediata en las redes sociales el día 3 de agosto de 2022, cuando fue informado de la tragedia.
Sin embargo, esta y otras acciones, de acuerdo con analistas como el mexicano Raymundo Riva Palacio, no impedirían el golpe político que recibiría Riquelme, el grupo Coahuila, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) o funcionarios federales del gabinete presidencial liderado por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
Raymundo Riva Palacio advirtió “daños colaterales” y políticos
Al respecto, el periodista Raymundo Riva Palacio consideró en su más reciente columna para Ejecentral que además de los 10 mineros atrapados en la mina de Sabinas, hay un daño colateral con nombre y apellido, encabezado por el mismísimo gobernador priista Miguel Riquelme, pues “todos los caminos de los probables responsables del siniestro conectan” con él.
También reveló que conforme avancen los trabajos de búsqueda y rescate en los pozos de Coahuila, así como de los propietarios de la concesión o los contratos, además de posibles vinculaciones a funcionarios, podrían ser un golpe durísimo para el tricolor, aunque tiene una salida, la de “sacudirse el golpe y trasladarlos a la Ciudad de México”, es decir, a AMLO y la 4T.
Lo anterior, porque podrían estar involucrados tanto Manuel Bartlett de la Comisión Federal de Electricidad por las concesiones y contratos otorgados, así como a la secretaria del Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde por fallas en la vigilancia y supervisión de las condiciones en que se laboraba en dichas minas.
Sin embargo, Riquelme también deberá dar la cara, de acuerdo con el analista político, principalmente por el título de concesión de la mina en manos de Claudia María Iribarren González, pariente de Martha Carolina Morales Iribarren, ex alcaldesa de Sabinas, quien funge actualmente como subsecretaria local de Trabajo desde febrero de 2021.
Es decir, el mandatario estatal pudo haber incurrido en un conflicto de interés, pues la funcionaria habría sido incorporada supuestamente para “reforzar la región carbonífera” donde precisamente invierten sus familiares.
Riquelme, explicó el periodista Raymundo Riva Palacio, ha sabido guardar silencio y no revelar nada sobre las relaciones que existen entre la industria del carbón, las autoridades locales y desde luego el Partido Revolucionario Institucional.
“Ignoró que había conflicto de interés y un potencial para que le explotara en las manos, lo que finalmente sucedió”, concluyó el analista político mexicano en la columna El político atrapado en la mina para Ejecentral.
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