El pánico y el terror inundó a los habitantes de una comunidad de Cancún, Quintana Roo, luego de que se encontrara una cabeza humana al interior de una hielera, acompañada de un mensaje firmado por la delincuencia organizada.
El macabro hallazgo se reportó en la tarde del sábado 6 de agosto, alrededor de las 16:00 horas, en un parque ubicado por la calle 65 de la Región 91 de Cancún. Según reportes locales, testigos indicaron que sujetos desconocidos abandonaron una hielera de unicel en el lugar referido y posteriormente emprendieron la huida.
Ante la curiosidad por saber de qué se trataba, algunos se acercaron y se vieron sorprendidos ante lo que había en su interior: restos de la víctima en supuesto estado de putrefacción con una cartulina fosforescente en la que estaba escrito un narcomensaje. Fue así que se dio aviso a las autoridades locales para que procedieran a realizar las diligencias correspondientes.
Al sitio arribaron un par de patrullas de la Policía de Quintana Roo y elementos de los Servicios Periciales de la Fiscalía estatal, quienes acordonaron la zona para el levantamiento del cuerpo, trasladarlo a las inmediaciones del Servicio Médico Forense y así conocer su identidad, la cual hasta el momento permanece en calidad de desconocida.
Aunque algunos medios locales señalaron que se desconocía si se trataba de un hombre o una mujer, se presume que podría tratarse de un individuo de nacionalidad colombiana, según reportes preliminares, quien era un supuesto colaborador de prestamistas “gota a gota”; aunque como se mencionó, lo anterior todavía no ha sido confirmado.
Por su parte, personal de la Fiscalía General del Estado procedió al levantamiento de los datos de prueba con el fin de iniciar la investigación correspondiente. Por estos hechos, ninguna persona ha sido detenida o identificada como presunta responsable.
Respecto al mensaje escrito en la cartulina, reportes locales indicaron que refería a una supuesta “cacería gota a gota”, pero toda la información que se conoce hasta el momento es preliminar, por lo que no hay reportes oficiales sobre lo sucedido.
En ese mismo fin de semana, a poco más de seis kilómetros del macabro hallazgo, se registró un ataque armado en el fraccionamiento Azul Bonampak, en el cual dos personas perdieron la vida y una más resultó lesionada.
Medios locales indicaron que la agresión ocurrió en uno de los inmuebles de dicho fraccionamiento, localizado en la Región 247 de Cancún. El ciudadano que fue herido tuvo que ser trasladado al Hospital General Jesús Kumate para recibir atención médica. Sobre las víctimas mortales se desconoce su identidad.
Una semana antes, el 29 de julio, un hombre fue asesinado afuera de su domicilio en el fraccionamiento Villas del Mar Plus, en Cancún, mientras su hijo presenciaba el ataque. El menor de 12 años fue trasladado a un hospital de la zona ya que uno de los proyectiles lo alcanzó.
De manera preliminar se señaló que la víctima mortal era un trabajador afiliado al Sindicato de Taxistas Andrés Quintana Roo. En el lugar de la agresión se encontraron 10 casquillos de bala de .9 milímetros.
La ola de violencia que inunda a Cancún ha suscitado que se lleven a cabo este tipo de hallazgos, enfrentamientos y balaceras, como la sucedida el 23 de julio en Playa del Carmen, sobre la calle 14 y la 1 de la Quinta Avenida, la cual dejó un saldo de tres personas lesionadas y nueve detenidos.
SEGUIR LEYENDO: