En el Estado de México el inicio de la campaña electoral está prevista formalmente para el 2 de abril de 2023, y a partir de entonces los abanderados de los distintos partidos políticos tendrán dos meses para recorrer la entidad y presentar sus propuestas a los casi 12 millones de votantes, sin embargo, los aspirantes a suceder Alfredo del Mazo Maza arrancaron la carrera desde la primera semana de agosto de 2022.
Al conocerse los nombres de Delfina Gómez Álvarez, Enrique Vargas del Villar, Juan Zepeda Hernández y Omar Ortega álvarez, algunos críticos políticos apuntaron que sobre los aspirantes pesan escándalos por delitos electorales, “moches” impuestos a trabajadores de Texcoco, polémicas por enriquecimiento, violencia política de género, o bien, hasta por el bochorno político de haber perdido hasta cinco elecciones en esa entidad.
En un contexto donde la ciudadanía muestra signos de cansancio por los políticos tradicionales, a quienes asocian a actos de corrupción y tráfico de influencias, los nuevos aspirantes resultan ser los mismos de elecciones pasadas, aunque en algunos casos solo cambiaron de colores.
Delfina, la maestra cuyo ascenso político avanza
Este jueves 4 de agosto, Morena anunció a Delfina Gómez Álvarez como la ganadora de la encuesta interna para definir la candidatura a la gubernatura del Edomex, sin embargo, la maestra será nombrada Coordinadora de los Comités de Defensa de la 4T, puesto que la ley electoral prohíbe los actos anticipados de precampaña o campaña.
La maestra Delfina Gómez Álvarez es señalada, tanto por columnistas como por partidos de oposición a Morena, de ser una “delincuente confesa”, debido a que ella misma admitió que durante su gestión como presidenta municipal de Texcoco (2013-2015) realizó un descuento del 10% a los sueldos de los trabajadores del Ayuntamiento para destinar esos recursos a la formación de Morena.
En su defensa, la maestra argumentó que fueron los propios trabajadores quienes le solicitaron, a través de una carta, que se les realizará una retención proporcional de su salario para destinar el dinero a obras en beneficio de la sociedad.
Enrique Vargas, el dos veces alcalde de Huixquilucan
Un día después del anuncio de Morena vino la cascada de destapes en los distintos partidos que se perfilan a competir de manera individual en el territorio mexiquense. El viernes ocurrió el madruguete del PAN a sus socios de la Alianza Va por México y divulgó a los cuatro vientos de las redes sociales que su abanderado será el ex alcalde Huixquilucan, Enrique Vargas del Villar.
Vargas del Villar, quien actualmente se desempeña como coordinador panista en el Congreso del Estado de México, es también un exitoso empresario que en 2021 se enfrentó a un escándalo por omitir los ingresos que obtuvo como accionista de dos empresas, mismas que obtuvieron contratos millonarios mientras él fue alcalde Huixquilucan en dos periodos consecutivos.
Además de gobernar uno de los municipios más ricos de la entidad de 2016 a 2021, Enrique Vargas del Villar dejó las riendas de la alcaldía en manos de su esposa Romina Contreras Carrasco.
En otro episodio controvertido, Vargas del Villar fue denunciado públicamente por la regidora de Morena en Hixquilucán, Gabriela Garay, por supuestos actos de violencia de género mientras él ostentaba el cargo de presidente municipal. No obstante, no se tiene conocimiento que estas acusaciones trascendieran formalmente, aunque sí generó un reproche por legisladoras morenistas en el Congreso del Edomex.
MC y su candidato rocanrolero
Movimiento Ciudadano (MC), el partido fresco de la política mexicana que lavó el rostro al senador, y experredista, Juan Zepeda, que al igual que Delfina Gómez, va en un segundo intento por llegar al Palacio de Gobierno en Toluca.
Zepeda llegó al Senado por la vía plurinominal la ser postulado por el PRD, luego de perder varias elecciones en el Estado de México, donde se ha postulado como candidato a gobernador, a senador y a también a la presidencia municipal de Nezahualcóyotl.
En total, Zepeda suma cinco descalabros en las urnas, y luego que en 2017 quedó en tercer lugar en la elección de gobernador, el nuevo emecista fue cuestionado por el manejo de 32 millones de pesos para promocionar su imagen a través de espectaculares en distintos puntos de la entidad.
Uno de sus mejores episodios como candidato fue cuando se enfundó en una chamarra de piel, tomó la guitarra eléctrica y deleitó a sus seguidores con una “rola de buen rock”.
Finalmente, el PRD salió a decir que posee sus propios cuadros y apuntó a Omar Ortega, coordinador del sol azteca en el congreso estatal, como su eventual candidato en caso de que no se alcance un acuerdo con el PRI y el PAN para ir en coalición, tal y como lo han hecho en los últimos dos años.
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