Luego de la explosión en un depósito de combustibles en Matanzas, Cuba, México fue la primera delegación internacional en acudir para brindar apoyo ante la tragedia, seguido de Venezuela. Pero la ayuda de parte del gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) no ha terminado. Un alto funcionario del sector energético mexicano reveló que a través de Petróleos Mexicanos (Pemex) se está preparando un envío de combustible a la isla, a manera de “ayuda humanitaria”.
Aún no se define cuánta cantidad de combustible será enviado de México a Cuba, pero la decisión ya fue tomada, según adelantaba el funcionario. Se trata de la segunda ocasión en que se envía desde territorio mexicano este tipo de apoyo a la isla. Y es que en julio de 2021, un tanquero de Pemex se dirigió a Cuba con cargamentos de alimentos y unos 20 millones de litros de diésel. El presidente López Obrador dijo entonces que se trataba de la ayuda humanitaria que había prometido a la isla tras las protestas por la crisis económica vivida a causa de la pandemia.
En tanto, cuatro aviones de la Fuerza Aérea Mexicana aterrizaron durante la noche y madrugada de este sábado en Cuba para brindar ayuda ante el incendio de dos tanques de petróleo que se registró en un área industrial en la provincia de Matanzas. Por ello, el dictador Miguel Díaz-Canel se pronunció a través de su cuenta verificada de Twitter para agradecer al Gobierno de México por la solidaridad mostrada al pueblo cubano, así como por la ayuda que enviaron a través de las Fuerzas Armadas Mexicanas. Del mismo modo, el mensaje también fue dirigido a los gobiernos de Venezuela, Rusia, Nicaragua, Argentina y Chile.
Y en misma red social, el descontento de los propios mexicanos no se hizo esperar. Con comentarios como “Aquí no ayuda ni a las víctimas de la Línea 12″, “Mientras tanto aquí los mineros siguen sin ser rescatados” o “Qué bueno que ahí sí mandan rápido la ayuda”, los usuarios reclamaron la inmediatez con la que se acudió a ayudar en la isla.
Mientras tanto, los equipos de emergencia de Cuba, con apoyo internacional, siguen este domingo combatiendo el grave incendio desatado en una base de depósitos de combustible de Matanzas, en el oese de la isla y que ya han dejado un muerto, 121 heridos y 17 desaparecidos.
Las tareas de bomberos, especialistas y sanitarios se han mantenido durante toda la noche en la zona, donde las llamas ya han afectado a dos de los ocho depósitos, de 50,000 metros cúbicos cada uno.
Según medios oficiales, el incendio se ha acercado a un tercer depósito, aunque parece que los bomberos han logrado rebajar la temperatura en la zona refrescando, incluso con un helicóptero, con agua de mar.
De forma paralela se trabaja en la evacuación del diésel en este tercer depósito, mediante camiones cisterna y un buque de cabotaje, que este domingo tratará de atracar en la zona para evacuar parte del combustible.
El último parte del Ministerio de Salud Pública (Minsap), de las 19:00 hora local del sábado (23.00 GMT), hablaba de 36 pacientes hospitalizados, de los que cinco se encontraban críticos y tres graves. Se prevé que las autoridades locales den un nuevo parte a las 10.00 hora local (14.00 GMT).
De madrugada se han unido a las tareas lucha contra el incendio equipos de especialistas de México y Venezuela.
El equipo mexicano, el primero en llegar al lugar de los hechos, cuenta con 60 militares y 16 técnicos especialistas en enfrentamiento de incendios industriales de la petrolera estatal Pemex.
Desde Venezuela llegaron 35 especialistas de la petrolera nacional PDVSA y 20 toneladas de insumos.
El incendio se declaró sobre las 19:00 hora local (23.00 GMT) del viernes, según las primeras hipótesis cuando un rayo impactó en la base de depósitos de combustibles y sobrepasó las capacidades del sistema de pararrayos.
Esa misma tarde explotó el primer depósito, con unos 25.000 metros cúbicos de petróleo, y sobre las 7.00 hora local (11.00 GMT) prendió el segundo, con una cantidad indeterminada de fuel.
La llamas se han llegado a elevar varias decenas de metros, tiñendo el cielo de la cercana Matanzas de rojo, y la enorme columna de humo negro ha alcanzado La Habana, a más de 100 kilómetros de distancia.
Con información de agencias
SEGUIR LEYENDO: