El presente del Partido Revolucionario Institucional (PRI) dista mucho de la historia que representó en el país, pues con solo tres estados gobernados -dos de ellos que tendrán elecciones en 2023-, el futuro del instituto político no se vislumbra exitoso y muchos especialistas dan por hecho que está más cerca la extinción que la resurrección.
No obstante, el próximo año se dará la batalla final -para muchos-, puesto que estará en juego la gubernatura del Estado de México, el estado más importante para el priismo, ya que fue ahí donde se fundó el Grupo Atlacomulco, uno de los más poderosos e importantes al interior del tricolor.
Lo que significaría una elección de trámite en años pasados, podría volverse una catástrofe, ya que el partido se ha visto afectado en las últimas semanas por los escándalos de su presidente nacional, Alejandro Alito Moreno Cárdenas, además de la adhesión a la alianza Va por México -al lado del Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
PRI en el Estado de México
Desde la fundación del México moderno, los grupos revolucionarios han gobernado el Estado de México. Fue Filiberto Gómez, quien de la mano del Partido Nacional Revolucionario (PNR), se convirtió en el primer jefe del Ejecutivo de este instituto político en 1925.
Sin embargo, fue Alfredo del Mazo Vélez el primer gobernador emanado de las filas del Revolucionario Institucional (1945-1951), quien sentaría toda una tradición de priismo en la entidad, pues se convertiría en uno de los hombres más poderosos de la entidad al contar con trayectoria familiar al ser hijo de Manuel Del Mazo Villasante, presidente municipal de Atlacomulco.
Justo en esa demarcación es que nació la idea de que existía un grupo poderoso, mejor conocido como El Grupo Atlacomulco, el cual se dijo fue fundado y liderado por Carlos Hank González, quien también fue gobernador del estado de 1969 a 1975.
Aunque conviene recordar que dicha agrupación no es una organización formal del partido político, más bien ha sido un término académico y propio de la prensa para explicar algunos nexos laborales, familiares y económicos de los políticos mexiquenses.
De acuerdo a lo que se conoce, los mandatarios locales que han formado parte de dicha agrupación han sido Isidro Fabela -con el PRM de 1942-1945-, Alfredo del Mazo Vélez (1945-1951), Alfredo del Mazo González (1981-1986), Salvador Sánchez Colín (1951-1957), Arturo Montiel Rojas (1999-2005), Enrique Peña Nieto (2005-2011) y Alfredo del Mazo Maza (2017-2023).
Ahora, la responsabilidad de la sucesión de la gubernatura -de acuerdo con apuntes de académicos y especialistas- recaerá en Alfredo del Mazo, el actual mandatario de la entidad, debido a que se le está cuestionando su lealtad con el priismo, puesto que este político se ha vuelto cercano al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
Además de que, hasta este momento, no se ha pronunciado a favor o en contra de algún cuadro relevante de su gabinete, por lo que se desconoce quién podría ser su sucesor o si apoyará a su partido político durante dicho proceso.
Elecciones 2023
Pese a todo lo anterior, muchos especialistas han apuntado al silencio que han guardado los grandes cuadros priistas mexiquenses, pues no se han pronunciado al respecto sobre el próximo proceso electoral.
Personajes como Emilio Chauyffet, César Camacho Quiroz, Arturo Montiel Rojas, Enrique Peña Nieto o Eruviel Ávila no se han posicionado; sin embargo, algunos de ellos han pedido la renuncia de Alito Moreno, personaje que podría definir el futuro también del partido, pues la alianza con el PAN y PRD podría cambiar el futuro de la entidad.
Muchos de estos históricos se han alejado de la escena pública, mientras el exgobernador de Campeche continúe al frente del partido político. Empero, será en las próximas semanas cuando se conocerá la cara que presentará el partido, lo que definiría su futuro.
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