Refinería de Dos Bocas: a un mes de inaugurada instalan energía eléctrica en todas las plantas

A un mes de que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, inauguró la primera fase de construcción de la Refinería Olmeca de Dos Bocas, en Paraíso, Tabasco, este complejo petrolero tiene la meta de producir gasolina para el mercado interno en 2023, por ello siguen las obras para poner a punto este proyecto prioritario para el Ejecutivo federal y su plan de soberanía energética.

De acuerdo con las propias autoridades de la Refinería Olmeca, esta se encuentra en la etapa de integración entre las plantas, la cual consiste en “la conexión de tuberías, cables eléctricos y cables electrónicos que se tienen que interconectar entre todas las áreas que la componen.

Un día antes del evento de inauguración, se dio a conocer que la Comisión Reguladora de Energía (CRE) otorgó a Petróleos Mexicanos (Pemex) el permiso para la operación de la planta eléctrica que alimentará a Dos Bocas, por lo que actualmente se lleva a cabo el tendido de cable que conecta a las subestaciones eléctricas con cada una de las plantas.

Entre los avances, destacan los de las plantas que brindan servicios a los procesos, tal como la de cogeneración, que proveerá energía eléctrica y vapor para la operación de la Refinería Olmeca.

El gobierno federal sostuvo que se mantienen los empleos en este proyecto, luego que se presentaron denuncias por parte de algunos trabajadores, quienes acusaron despidos luego del 1 de julio, fecha en que el presidente de la República y su comitiva inauguraron de forma simbólica la refinería.

De modo que en esta fase se trabaja en dotar de energía eléctrica a toda la Refinería Olmeca de Dos Bocas para avanzar posteriormente a las pruebas ya con las plantas interconectadas.

Rocío Nahle, secretaría de Energía, argumentó luego del evento del 1 de julio que este proyecto aún debe pasar por el periodo de prueba para iniciar en 2023 con la refinación del petróleo crudo.

“Se me hace una mezquindad quienes nada más critican por una cuestión ideológica ante un hecho real. La refinería es una realidad”.

Nahle explicó que la fase de ensayo-error es vital para garantizar la seguridad de los equipos (se estiman más de 90 mil entre válvulas, compresores y más), así como del personal que vaya a laborar en los mismos: “Lo marca la seguridad industrial y la velocidad del trabajo”.

“Tenemos mucha confianza en que todos los equipos - son nuevos; son de seguridad. Se hicieron con base de ingeniería y con cálculos exactos - pues no tengamos problemas”, mencionó.

“El compromiso con el presidente es tratar que en diciembre podamos meter el primer barril (de crudo) y que la integración pueda quedar”.

A mediados de julio, aproximadamente 200 obreros que estaban contratados con la empresa COIMSA se manifestaron al exterior de la recién inaugurada Refinería Olmeca, ubicada en el puerto de Dos Bocas, Tabasco, para denunciar que fueron despedidos injustificadamente.

Vestidos con sus trajes y cascos de trabajo color naranja con escudos azules, los inconformes señalaron que además de ser dados de baja sin justificación ni aviso previo solo les estaban ofreciendo 3 mil pesos de liquidación, lo que es equivalente a una semana de su sueldo.

Sin embargo, desde el gobierno federal se negó la versión de los despidos masivos y apuntó que las fuentes de trabajo se mantendrían en tanto la refinería no esté completamente terminada.

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