Ernesto “N” trabajaba como becario en el colegio preescolar José Joaquín Fernández de Lizardi, ubicado en la comunidad Camino Real, en Silao, Guanajuato. El 24 de junio, madres de estudiantes del kinder denunciaron ante el Ministerio Público que el docente había cometido abuso sexual contra al menos seis niñas del plantel.

El agresor estaba a cargo de un grupo de 15 niñas y niños, según informaron medios locales, en los que se dio a conocer que los abusos habrían sido cometidos al interior de un salón de clases que Ernesto “N” mantenía aislado de la vista de los demás, pues colocó cartones en las ventanas con el pretexto de que usaría el aula para proyectar películas para sus estudiantes.

Presentó su renuncia el mismo día en que las madres de familia lo denunciaron ante el MP y se dio a la fuga, por lo que la Secretaría de Educación de Guanajuato (SEG) no pudo implementar ninguna sanción en su contra.

Fue hasta más de un mes después, el miércoles 3 de agosto, que la Fiscalía General del Estado (FGE) logró capturar al agresor con la participación de la Agencia de Investigación Criminal (AIC). Además de cumplimentar la orden de aprehensión contra Ernesto “N”, la institución de seguridad confirmó la vinculación a proceso del sujeto por los delitos referidos.

“El imputado ha sido vinculado a proceso penal por su probable responsabilidad en los abusos sexuales cometidos en un preescolar”, escribió la Fiscalía en sus redes sociales para informar del avance en el caso.

Hasta el momento, las autoridades no han brindado información sobre la cantidad de procesos distintos que enfrentará el detenido, pues las denuncias ciudadanas apuntaron un mínimo de seis víctimas, pero esta cifra podría modificarse.

Por su parte, ante la indignación y las constantes protestas y cuestionamientos de las familias de la comunidad, la SEG informó el 27 de junio que había implementado el Protocolo para la Detección, Prevención y Actuación en caso de Violencia Escolar con el objetivo de determinar la responsabilidad y sanciones correspondientes tanto de la Orientadora Educativa como de la Coordinadora del Preescolar, cuyo nombre es Brenda Blancarte, identificada como pareja sentimental de Ernesto “N”.

Respecto a Blancarte, ninguna autoridad del estado ha revelado si estaba enterada de los abusos que presuntamente habría cometido Ernesto “N” mientras trabajaba en el plantel.

El pasado 28 de julio, durante una sesión del Grupo Parlamentario del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en el estado, el coordinador Ernesto Millán Soberanes exigió la destitución de Jorge Hernández Meza, titular de la SEG, “por su incapacidad de resolver conflictos y proteger a los niños, niñas y adolescentes que acuden a la escuela”.

La exigencia no sólo se derivó de las denuncias de abuso sexual infantil en Silao, sino que, compartió el legislador, entre enero y julio de 2022 se reportaron 60 denuncias por acoso sexual en ambientes escolares.

Además, cuestionó el desempeño de la dependencia dirigida por Hernández Mera, pues desde 2018 sólo ha aplicado sanciones a 23 docentes por abusos, hostigamiento, acoso y abuso sexual.

Igualmente, señaló al gobierno de Diego Sinhue Rodríguez Vallejo por no exigirle a su secretario de educación “acciones más firmes y aplicación correcta de protocolos”.

Finalmente, enlistó como responsables a instancias como la Secretaría de Gobierno, a la Procuraduría de los Derechos Humanos y a la Fiscalía General del Estado.

“Si el abuso contra menores no les mueve la conciencia y prefieren ocultar, es claro ejemplo de que las autoridades del estado están completamente acabadas”, sostuvo Millán Soberanes.

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