Como parte de la campaña de matrimonios civiles colectivos de las personas privadas de la libertad, el pasado viernes 29 de julio se celebraron en las inmediaciones del Reclusorio Varonil Oriente de la Ciudad de México 113 uniones matrimoniales. Y es que entre las múltiples dificultades que internos viven diariamente al interior del penal, el amor surge como un rayito de esperanza para ayudarlos a sobrellevar sus distintos procesos judiciales en el cumplimiento de sus respectivas sentencias.
Fue a través de un comunicado que la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México dio a conocer que el Gobierno de la capital mexicana busca formalizar el estado civil de las personas privadas de su libertad con sus parejas y regularizar la situación legal, por ello, se realiza trabajo en conjunto entre la Consejería Jurídica y de Servicios Legales, el Registro Civil y la Subsecretaría de Sistema Penitenciarios de la SSC.
Con los 113 enlaces matrimoniales celebrados el pasado viernes, suman 218 bodas en los diferentes reclusorios de la capital en lo que va de este 2022 tras la reanudación de actividades que habían sido suspendidas por la contingencia sanitaria que derivó de la pandemia de COVID-19.
Aunque las personas privadas de su libertad no se encuentran recluidas precisamente por su buen comportamiento en la sociedad, aún dentro de los diferentes centros penitenciarios tienen vigentes sus derechos humanos, contrario a lo que sucede con sus derechos civiles y políticos los cuales quedan suspendidos una vez aprehendidos.
Dicha circunstancia fue resaltada por el Consejero Jurídico y de Servicios Legales de la Ciudad de México, Néstor Vargas Solano, quien durante su asistencia a las bodas manifestó: “no obstante tener restringidos algunos derechos por mandato judicial, los varones que hoy se unieron en matrimonio gozan plenamente de todos los derechos humanos, entre los cuales está formar una familia, deseo a los contrayentes forjar relaciones basadas en el respeto y apoyo mutuo y que su enlace favorezca sus vidas”.
Por su parte, el Subsecretario de Sistema Penitenciario de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), Enrique Serrano Flores, detalló que de los enlaces matrimoniales celebrados en el Reclusorio Oriente, seis fueron interreclusorios, es decir, de personas privadas de su libertad en ese centro con mujeres de los Centros Femeniles de Reinserción Social de Santa Martha y Tepepan.
Entre las y los funcionarios que felicitaron a las parejas contrayentes destacó también la licenciada Claudia Virginia Franco Corona, titular de la Dirección General de Registro Civil de la Ciudad de México, quien también agradeció el apoyo para realizar las campañas de matrimonios colectivos en los centros penitenciarios de la capital.
Adicionalmente, la licenciada Claudia Virginia Franco Corona expresó a los beneficiados que fue un privilegio presidir su ceremonia y compartir uno de los actos de amor más importantes de sus vidas como pareja.
“Para la institución que represento, fomentar el pleno goce de sus derechos representa un paso más para el acceso a los derechos universal, nos queda claro que el concepto de familia se transforma de manera permanente, respondiendo a los cambios sociales propios de cada momento histórico, por eso hoy celebro la decisión que han tomado de unir sus vidas”, señaló la funcionaria.
El Subsecretario de Sistema Penitenciario de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), Enrique Serrano Flores, mencionó que una de las finalidades que se tiene en el Sistema Penitenciario es favorecer las relaciones familiares para, de este modo, fortalecer a las familias.
Durante la ceremonia se realizaron 19 registros y siete reconocimientos de hijos de personas privadas de la libertad. Cabe señalar que es de suma importancia para las personas privadas de su libertad normalizar su situación jurídica mediante el matrimonio, lo que contribuye a que ejerzan su derecho humano de formar una familia.
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