La participación de la Agencia Antidrogas Estadounidense (DEA) en labores de inteligencia ha resultado fundamental para la captura de capos mexicanos, algunos de los cuales han sido extraditados a Estados Unidos por su involucramiento en el tráfico de drogas hacia el país vecino.
Una de las capturas con mayor relevancia en los últimos diez años fue la de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, en 2014, así como la reciente detención de Rafael Caro Quintero en Sinaloa, el pasado 15 de julio de este 2022.
A pesar de que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha negado en diversas ocasiones el involucramiento directo de Estados Unidos en la recaptura del Narco de narcos, el fiscal general Merrick B. Garland aseguró que su aprehensión fue “la culminación del trabajo incansable de la DEA y sus socios mexicanos”, indicó.
Las distintas versiones han desatado un sinfín de preguntas sobre la colaboración entre agentes estadounidenses y autoridades mexicanas en labores de inteligencia. Sin embargo, el modo de participación de la DEA no siempre es el mismo, toda vez que su intervención en la última captura de El Chapo Guzmán fue diferente a la de Caro Quintero.
Si bien es cierto que la DEA estuvo involucrada en la captura de El Chapo y de Quintero, con el primer capo sí participaron agentes estadounidenses en los operativos, mientras que con el fundador del Cártel de Guadalajara su participación fue a través de informes e investigaciones de inteligencia.
Agente de la DEA disfrazado de marino
Para la captura de Guzmán Loera en febrero de 2014, un agente de la DEA, identificado como Victor Vazquez, tuvo que disfrazarse de un elemento de la Marina de México para lograr su acometido.
En su testimonio brindado en la Corte de Brooklyn -donde se llevó a cabo el juicio contra El Chapo-, el agente nacido en Durango y criado en EEUU compartió videos y fotografías de la detención en una habitación del hotel Miramar en Mazatlán, Sinaloa.
Para la captura del capo, se hizo uso de la asistencia tecnológica proporcionada por las agencias federales estadounidenses. Según sus explicaciones, él era quien coordinaba al equipo de marinos mexicanos, lo que confirmaba la participación directa de la DEA.
Algo similar ocurrió en la última detención de Guzmán Loera en enero de 2016, en el operativo llamado “Cisne Negro”, con el que finalmente se sellaba el destino criminal del capo del Cártel de Sinaloa.
El operativo llevado a cabo en Los Mochis, Sinaloa, estuvo coordinado por Marco Antonio Ortega Siu, jefe de la Unidad de Operaciones Especiales, un cuerpo élite de la Marina capacitado por el Comando Norte de las Fuerzas Armadas de EEUU.
Fue así que elementos de la Armada de México irrumpieron en una casa de seguridad ubicada en el fraccionamiento Las Palmas, donde se encontraba El Chapo. Sin embargo, fueron recibidos a balas por integrantes del Cártel de Sinaloa, mientras el capo se escapaba. Debido a la lluvia, El Chapo y su escolta salieron a las calles y a los pocos minutos fueron interceptados por agentes de la Policía Federal.
La DEA y la detención de Caro Quintero
Por otra parte, en la captura de Caro Quintero solo participaron elementos de la Marina, como ha indicado López Obrador. Sin embargo, eso no quiere decir que la DEA no estuvo involucrada en los trabajos de inteligencia.
De acuerdo con fuentes retomadas por The Washington Post, entre 2013 y 2022 las autoridades de México y Estados Unidos realizaron al menos 12 operativos -todos fallidos- para llevar a Quintero a la justicia, algunas de las cuales no fueron reportadas de manera pública.
Fue así que durante nueve años la DEA proporcionó información actualizada sobre la posible ubicación del Narco de narcos al Ejército y la Marina de México. Y es que incluso la directora de dicha agencia, Anne Milgram, indicó que la captura de Quintero fue producto de la colaboración entre ambos países. “Por más de 30 años, hombres y mujeres de la DEA han trabajado incansablemente para llevar a Caro Quintero a la justica”, señaló en un comunicado.
Así, mientras que con la detención de Guzmán Loera se hizo de conocimiento público la participación de una agente de la DEA en el operativo de 2014, con Caro Quintero su colaboración fue a través de servicios de inteligencia, pues en su captura solo estuvieron involucrados elementos de la Marina.
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