Una oleada de críticas se desató contra el Gobierno de la autodenominada Cuarta Transformación (4T) tras darse a conocer que las obras del polémico Tramo 5 del Tren Maya se reanudarían, pese al freno judicial que impedía su avance.
En respuesta a ello, se pronunció el ex presidente, Felipe Calderón Hinojosa, quien - como ferviente defensor del medio ambiente - declaró en su cuenta de Twitter que cesar las construcciones del mega proyecto representaría un esfuerzo paran combatir el cambio climático - responsable de los estragos ambientales alrededor del mundo.
“El cambio climático es más grave de lo previsto (...) Sí es un tema de Seguridad Nacional. Preservar la selva y cumplir la ley ambiental también lo es. ¡No al revés! #SélvamedelTren”.
Este último punto refiere a la “movida” del Consejo de Seguridad para respaldar a la obra con la categoría de “seguridad nacional” y, de ese modo, evadir la resolución que un juez de Yucatán concedió el 30 de mayo pasado en favor de (una parte de) los denunciantes contra el Tren.
Aunque han sido diversos los amparos y recursos contra el avance de la magna obra (presentados por celebridades, asociaciones y especialistas), el común denominador alude a la falta de permisos ambientales por parte del Fondo Nacional del Fomento al Turismo (Fonatur).
Y es que, de acuerdo con activistas, se estima que el segmento de más de 60 kilómetros, y con ruta de Playa del Carmen a Tulum, implicó la tala de miles de árboles y contaminación a ríos subterráneos. En tanto, la ONG, Greenpeace, argumentó que 12 especies de flora y 31 de fauna catalogadas “en riesgo” resultarían perjudicadas.
Fue bajo ese argumento que el Juzgado Primero de Distrito de Yucatán instruyo la suspensión definitiva del Tramo 5, a fin de prevenir el potencial “daño irreversible en el complejo de cavernas, cenotes y ríos subterráneos” de la zona. Con ello, también se prohibía avanzar en obras relacionadas u otra actividad con ejecución material.
Pero el 18 de julio pasado, el Consejo del Tren Maya catalogó oficialmente a la obra como de seguridad nacional y, con ello, la Secretaría de Gobernación (Segob) y la de Seguridad Pública declararon la reanudación de sus construcciones. Aunque denuncias señalaron que éstas habían continuado pese al decreto judicial y previo a la declaración federal.
A pesar de esto, el presidente, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), negó que el reinicio del Tramo 5 figure como un desacato a la orden judicial: “Tenemos la facultad para hacerlo”, aseveró en su mañanera de este 19 de julio.
“Ante los jueces se lleva a cabo el procedimiento para demostrar que no hay ningún daño (ambiental), eso se continúa. Pero, además, por ser un asunto de seguridad nacional se tomó un acuerdo y es el que se está aplicando”, explicó.
Asimismo, justificó la decisión federal al señalar que el cese de las construcciones representaba un alto costo al presupuesto público - aunque no detalló la cifra exacta. Además, aprovechó para volver a lanzarse contra quienes considera como “pseudoambientalistas”, los cuales, pronunció, orquestan conspiraciones contra su administración.
“No por los intereses de un grupo vamos a detener una obra en beneficio del pueblo y que el tiempo que llevaba parada nos significaba un alto costo nada más por los intereses políticos”.
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