El viernes 15 de julio de 2022 la corte de Nueva York lleva a cabo una audiencia previa en el proceso que sigue en contra de Genaro García Luna, ex secretario de Seguridad Pública de México, en la que se definirán los puntos complejos del caso y las mociones pendientes.
La Fiscalía de EEUU ha presentado mociones para que el juez acepte integrar más elementos de prueba en contra del acusado, que incluyen grabaciones de audio, y la participación de testigos que cuentan con información relevante en contra de García Luna, mientras que la defensa lucha para que el juez Brian Cogan desestime estos elementos para que el acusado llegue al juicio en mejores condiciones.
El abogado César De Castro, trata de impedir que en el juicio se tomen en cuenta los testimonios de la periodistas mexicana, Anabel Hernández y de Ruslan Mirvis, un compañero de celda de García Luna en Nueva York, y que se dedicó durante 20 días a grabar las conversaciones con el antiguo encargado de la Seguridad Pública de México.
Las autoridades norteamericanas alistan las condiciones del juicio que tiene al ex funcionario mexicano, en caso de ser encontrado culpable, a las puertas de una condena que podría alcanzar la cadena perpetua, por haber conspirado con el Cártel de Sinaloa para traficar droga hacia ese país.
El juez Brian Cogan, del Distrito de Nueva York, determinó que el inicio del juicio por cinco cargos de narcotráfico en contra de García Luna iniciará formalmente el 24 de octubre de 2022, sin embargo, en esta última audiencia previa, la defensa de García Luna trata de quitar del camino algunas pruebas que podrían hundir al antiguo funcionario federal.
Recientemente, la defensa del mexicano reveló que la Fiscalía de Nueva York sustentará sus acusaciones en los testimonios de Jesús “El Rey” Zambada, quien fue también la principal arma de los fiscales para que Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera fuera encontrado culpable y condenado a cadena perpetua.
De acuerdo con el Rey Zambada, él mismo entregó un maletín con tres millones de dólares a García Luna, cuando este último era director de la Agencia Federal de Investigación (AFI) para que no se llevarán operativos considerables en contra del Cártel de Sinaloa.
Mirvis y la trampa a García Luna
En la audiencia anterior, la defensa de García Luna presentó una petición de 20 páginas a la Corte del Distrito Este de Nueva York, donde argumentó que las más de 500 horas de grabaciones del informante de los fiscales, Ruslan Mirvis, no poseen sustento y apenas se eligieron un par de minutos inaudibles, donde no queda clara la intención de manipular a potenciales testigos, incluso los supuestos planes para asesinarlos.
Según el abogado César de Castro, para tratar de entender la conversación en la que García Luna habría mencionado a los testigos en su contra, “el oyente se ve obligado a hacer suposiciones para llenar los grandes vacíos en las conversaciones”.
“Ruslan Mirvis, el informante de la cárcel del gobierno que le dijo al Sr. García Luna que él era parte de la mafia rusa, no es sino un pornógrafo infantil”, dijo para tratar de desestimar su testimonio ante el jurado (cuyos integrantes permanecerán en el anonimato).
Con ello se pretende sostener que no hay asociaciones directas para mandar a matar al Rey Zambada ni a Luis Cárdenas Palomino, quien era subordinado del exsecretario federal.
De Castro alegó que este sujeto vio una oportunidad para ser beneficiado por las autoridades, porque enfrenta cargos que lo castigarían con 15 años hasta cadena perpetua tras las rejas por explotación sexual, delito que llevó a su arresto y acusación en 2017.
La importancia de la periodista Anabel Hernández
El abogado también se pronunció en diversos párrafos sobre lo que califica de rumores inadmisibles sobre las presuntas amenazas de García Luna contra la reportera de investigación, Anabel Hernández.
Dijo que a raíz de los audios obtenidos por Ruslan Mirvis, las acusaciones generales de manipulación de un periodista son muy confusas y no se entiende su supuesta relación con el tema del narcotráfico.
César De Castro desacreditó los reportajes de la comunicadora al tacharlos de una venganza personal que comenzó en 2007 contra su cliente. Pues la periodista, apuntó el abogado, se ha dedicado a acusar a funcionarios relevantes del gobierno mexicano de nexos con el narco.
La defensa de García Luna precisó que los fiscales no identifican a la periodista supuestamente amenazada por el acusado para que no publicara sus vínculos con cárteles de la droga. Pero están seguros de que es la autora de Los señores del narco (2010) y Los cómplices del presidente (2008).
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