“Los Chapitos” en la CDMX: así son sus vínculos y la disputa territorial que sostiene contra la Unión Tepito

En 2020 y 2021, representantes de los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán habrían viajado a la capital del país para reunirse con servidores públicos en su intento por expandir su negocio criminal

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Los Chapitos están en la
Los Chapitos están en la mira del gobierno norteamericano (Ilustración: Infobae)

El reciente enfrentamiento en la localidad de San Miguel Topilejo, en la alcaldía Tlalpan de la Ciudad de México, dejó al descubierto una vez más la presencia de “Los Chapitos” en la capital del país y sus intenciones por extender su territorio criminal.

El 12 de julio, 14 presuntos integrantes de la célula de los hijos de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, fueron detenidos por las autoridades capitalinas luego de un intenso operativo en el que resultaron heridos cuatro efectivos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), uno de ellos reportado como grave.

Algunos de los agresores portaban placas colgadas en su cuello con la imagen de un roedor, haciendo referencia a Ovidio Guzmán López, El Ratón, por quien el gobierno de Estados Unidos ofrece una recompensa de 5 millones de dólares a cambio de información que conduzca a su arresto o paradero.

Algunos de los detenidos en
Algunos de los detenidos en Topilejo utilizaban placas que los relacionarían con Los Chapitos, célula del Cártel de Sinaloa. (Fotos: Twitter/@c4jimenez)

Otro de los detenidos usaba un placa con el rostro de El Chapo. En los distintivos se podía leer la leyenda “Fuerzas Especiales” en la parte superior, y en la inferior se podía percibir las siglas “CDS” y “JGL”, lo que confirmaría su pertenencia al Cártel de Sinaloa.

Fue así como se volvió a hablar sobre las operaciones que los herederos del narcoimperio de Guzmán Loera llevan a cabo en la CDMX, aunque su presencia en la capital de la República se remonta a años atrás.

“Los Chapitos” y su reunión secreta en la CDMX

Tras la caída de El Chapo Guzmán en 2016, sus hijos Ovidio y Joaquín Guzmán López, así como Iván Archivado y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, tomaron el control de la fracción en el grupo criminal de su padre bajo la célula de Los Chapitos.

Los cuatro hermanos buscan expandir su imperio en la capital del país. De acuerdo con el periodista especialista en crimen y narcotráfico, Antonio Nieto, en febrero de 2020 se habría llevado a cabo una supuesta reunión entre diversos funcionarios públicos y presuntos servidores de Los Chapitos en la alcaldía Coyoacán.

Los Chapitos ya habían sido
Los Chapitos ya habían sido identificados como narcos relevantes del Cártel de Sinaloa (Departamento del Tesoro)

Sin embargo, no fue sino hasta 2021 cuando se comenzó a hablar de pactos y armamento entre ambas partes. En septiembre de dicho año, Nieto señaló que varios agentes de seguridad habrían sido convocados a un encuentro con miembros del crimen organizado.

El objetivo era dejar en claro a los policías locales que no interfirieran en las actividades de Los Chapitos y mejor se concentraran en la Unión Tepito, uno de sus principales rivales en la CDMX. A cambio de ello, ninguno de los agentes sería tocado.

Unión Tepito: un enemigo en común

El autor del libro Cártel Chilango indicó que esa última reunión se trataba de una “tregua” entre las células delictivas de Los Rorros, los Yayos y los Rodolfos, quienes compartían un mismo objetivo con Los Chapitos: arrebatarle el control y sacar a la Unión Tepito de Coyoacán y Benito Juárez, debido a que es el cártel con mayor presencia en la capital.

“Hace unas semanas hubo una reunión entre miembros de grupos delictivos locales, ex policías y supuestos representantes de los hijos del Chapo Guzmán para tomar bares, colonias y vías estratégicas de la capital”
La recompensa por los Chapitos
La recompensa por los Chapitos sumaría 400 millones de pesos (Foto: Especial)

Cabe mencionar que tras la caída del líder del Cártel de Tláhuac, Felipe de Jesús Luna, El Ojos, Los Rodolfos asumieron el poder y control en los negocios criminales de múltiples alcaldías, como Tláhuac, Coyoacán, Tlalpan, Milpa Alta, Xochimilco y Magdalena Contreras.

De igual manera, en 2021, la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SEIDO) desarticuló a una célula del Cártel de Sinaloa que operaba en el Estado de México, la cual recibía órdenes de Los Chapitos.

Se trataba de Los Sinaloas y su función era desempeñarse como enlaces entre Sinaloa y el Valle de México. Las toneladas de droga que eran enviadas desde el norte a la capital del país eran entregadas y distribuidas a los vendedores locales, unos ubicados en el famoso barrio de Tepito

La presencia del Cártel de Sinaloa en la CDMX no es reciente, pues de acuerdo con Antonio Nieto hay dos facciones: Los Chapitos y Los Mayos; sin embargo, las intenciones y el modo de operación de los primeros es generar violencia, pues entre sus actividades supuestamente se encuentro el secuestro a narcomenudistas en Tlalpan y Coyoacán, donde operarían otros capos identificados como “Cucho Mecero” y “El Boludo”.

El gobierno de los EEUU
El gobierno de los EEUU ha identificado a Los Chapitos como “miembros de alto rango del Cártel de Sinaloa”(Foto: Infobae México)

Es por ello que el enfrentamiento en Topilejo no fue algo aislado. De acuerdo con Nieto, el cargamento de cocaína abandonado en Mixcoac, Benito Juárez, que dio a conocer el vocero de la Fiscalía Capitalina, Ulises Lara, podría pertenecer a los integrantes de Los Chapitos que fueron detenidos el 12 de julio.

En total se encontraron 32 kilos de cocaína al interior de una camioneta con placas del Edomex y con un impacto de bala la semana pasada. Sin embargo, no hubo detenidos por estos hechos, a pesar de que el movimiento fue registrado por las cámaras del C5.

Cabe recordar que en diciembre de 2021, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmó una orden ejecutiva contra Ovidio Guzmán López, Iván Archivaldo Guzmán Salazar, Jesús Alfredo Guzmán Salazar y Joaquín Guzmán López, por quienes ofrecen una recompensa de hasta 20 millones de dólares (por los cuatro).

El gobierno de los EEUU los ha identificado como “miembros de alto rango del Cártel de Sinaloa”, además de que cada uno ha sido señalado por su participación en el trasiego de drogas.

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