Cargamento de cocaína abandonado en Mixcoac podría pertenecer a “Los Chapitos”

Un cargamento de cocaína abandonado en Mixcoac la semana pasada, ubicado en la alcaldía Benito Juárez de la Ciudad de México, podría pertenecer a los integrantes de “Los Chapitos” que fueron detenidos el pasado 12 de julio tras un enfrentamiento en San Miguel Topilejo.

De acuerdo con el vocero de la Fiscalía capitalina, Ulises Lara López, elementos de la Policía Bancaria e Industrial (PBI) localizaron un automóvil con múltiples paquetes de droga ocultos a la vista. La unidad se encontraba abandonada bajo el puente de Prolongación avenida Río Mixcoac en la colonia Actipan.

El vehículo con doble fondo contaba con placas del Estado de México y tenía un impacto de bala. A pesar de que no había personas a bordo, hallaron 32 kilos de cocaína. Además, las autoridades capitalinas indicaron que tenía el motor en marcha y a un metro de distancia encontraron un casquillo.

Lara López señaló que se realizarían las indagatorias correspondientes para esclarecer la procedencia del vehículo y de los paquetes de droga asegurados, con el fin de determinar si la unidad se encuentra relacionada con otras actividades ilícitas.

Aunque todavía no hay un reporte oficial sobre la procedencia del automóvil, así como tampoco de sus tripulantes o dueños, se podría tratar de un cargamento presuntamente ligado a la célula del Cártel de Sinaloa, Los Chapitos.

De acuerdo con el periodista Antonio Nieto, la cocaína asegurada pertenecería a los hijos de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo. Así lo mencionó en el programa N+, en el que a través de cámaras de seguridad expuso el movimiento del vehículo abandonado que supuestamente tenía como destino las faldas del Ajusco, en Topilejo.

La unidad X-Trail era custodiada por un par de motocicletas. Poco después de las 17:00 horas del pasado 5 de julio, el vehículo se trasladaba sobre la avenida río Mixcoac. Al pasar bajo un puente se escuchó una detonación de arma de fuego, según las indagatorias.

Por lo anterior, varios sujetos descendieron de sus automóviles y se acercaron a la X-Trail. Se presume que el conductor de dicha unidad habría huido a bordo de una motocicleta, dejando los paquetes de cocaína al interior del vehículo.

Asimismo, el autor del libro El cártel chilango: Origen, poder y saña de la Unión Tepito, comentó que las imágenes obtenidas por las cámaras del C5 habrían ayudado a elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la CDMX a dar con la casa de seguridad en Topilejo.

El pasado 12 de julio se registró un enfrentamiento entre supuestos miembros de la facción de Los Chapitos y efectivos de la SSC al sur de la capital del país. Y es que desde semanas previas se había reportado la presencia de hombres armados en la zona de Topilejo, según denuncias ciudadanas.

Ane ello, se realizó un operativo en el que lograron ubicar una finca en la colonia San Andrés Totoltepec. Se trataba de un restaurante inactivo, ubicado en el kilómetro 28 de la carretera federal que lleva hacia Cuernavaca, Morelos, y que era usado como una casa de seguridad por dicha célula del Cártel de Sinaloa.

A pesar de su estado de abandono, en su interior había cuatro personas privadas de su libertad que posteriormente fueron rescatadas, dio a conocer el titular de la SSC, Omar García Harfuch. Además, tenían droga y armas de diverso calibre, las cuales también fueron incautadas.

Tras el intercambio de disparos, se logró la detención de 14 personas, algunas de las cuales venían de Sinaloa, “lo cual quiere decir que vienen de un grupo de ese estado”, detalló García Harfuch y señaló al Cártel del Pacífico.

Su vínculo con Los Chapitos se dio a través de unas placas que portaban algunos de los detenidos en su cuello. Una cuenta con la imagen de un roedor, aludiendo a Ovidio Guzmán (hijo de El Chapo), a quien apodan El Ratón, mientras que otra tenía la imagen del mismo Joaquín Guzmán Loera.

Ambas insignias tenían inscrita la leyenda “Fuerzas Especiales” en la parte superior; debajo de la imagen venía la palabra “Comandante” y en la parte inferior se alcanzaban a leer las siglas “CDS” y “JGL”.

De acuerdo con Harfuch, al parecer los agresores llevaban de mes y medio a dos meses en esa zona, según la declaración de uno de los detenidos, comentó el secretario de Seguridad Ciudadana para Wradio. En el enfrentamiento cuatro oficiales resultaron heridos y se aseguraron nueve fusiles, tres pistolas, 12 granadas, 74 cargadores, equipo táctico y bolsas con marihuana.

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