Paso a paso de la balacera en la México-Cuernavaca: así cayeron secuestradores sinaloenses

Semanas antes de que la policía de la Ciudad de México se enfrentara a balazos contra presuntos secuestradores sinaloenses en la autopista México-Cuernavaca ya se habían recibido denuncias, pero el día del enfrentamiento llegó entre supuestas intenciones del narco por pelear la plaza de la capital del país.

De acuerdo con reportes preliminares, se trata de un célula prevista para operaciones de narcomenudeo desde el sur de la entidad, en los límites con Morelos. Presuntamente, los delincuentes reclutaban a distribuidores al simularse como agentes de seguridad.

Oficiales de inteligencia realizaban un operativo tras recibir reportes por las privaciones ilegales de la libertad en la zona de Topilejo. Alrededor del medio día de este 12 de julio ubicaron una casa de seguridad en la colonia San Andrés Totoltepec que los criminales utilizaban en un restaurante inactivo del kilómetro 20 de la carretera federal que va hacia Cuernavaca.

Cerca de las 14:20 horas, los agresores notaron la presencia policial, incluidos elementos de la Base Dragón que solicitaron apoyo de refuerzos. Al interior del inmueble había armas de guerra, granadas, chalecos tácticos, cascos y municiones de grueso calibre. Tan pronto como vieron que iban por ellos, dispararon desde el inmueble ubicado en una parte alta y se desató la balacera.

No se trataba de cualquier facción local, sino de una célula con capacidad de fuego para hacer frente a cualquier autoridad. El enfrentamiento se oyó a kilómetros de ahí. Habitantes de Topilejo estaban sorprendidos y tomaron imágenes de lo que parecía una película de acción por los estruendos de las metralletas.

Por varios minutos se prolongaron las fuertes detonaciones y dos agentes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México fueron heridos por los proyectiles, uno de ellos permanece en estado de gravedad.

Dos helicópteros del tipo Cóndor se trasladaron en auxilio para llevar al hospital a los policías lesionados. El caos ya se hacía evidente con filas kilométricas en la autopista México-Cuernavaca. Centenas de vehículos particulares, camiones de carga y del transporte público se paralizaron por el cierre del tramo.

Más de 150 policías y una tercera aeronave, así como dos unidades blindadas Unimog, Rino, también llegaron, lo mismo que patrullas del Ejército y la Guardia Nacional. Por el bosque cercano habían huido algunos secuestradores y los efectivos se internaron en su búsqueda.

Una hora más tarde, el área ya había sido registrada por los uniformados. Poco a poco fueron concentrados en el restaurante abandonado que tenía impactos en los cristales, algunos vidrios rotos y huellas del fuerte enfrentamiento.

Videos difundidos en redes sociales mostraban a elementos policiales y de la Guardia Nacional, mientras se resguardaban detrás de patrullas y hasta taxis que quedaron varados. De cualquier lado podrían provenir más ataques, debido al paraje rural con árboles que rodeaban el tramo.

Omar García Harfuch, jefe de la policía capitalina, informó de las detenciones preliminares, así como el personal herido. El secretario acudió a la zona del ataque, mientras que algunos de quienes escaparon al bosque eran arrestados al intentar escapar.

En total fueron 14 presuntos atacantes detenidos, algunos traídos de la zona boscosa. Previamente habían disparado a los helicópteros, pero no lograron dañarlos ni derribarlos. Algunos vehículos oficiales recibieron impactos de bala en el fuego cruzado, al igual que un auto particular color blanco, presuntamente perteneciente a los criminales.

Los conductores comenzaron a tomar rutas alternas, mientras que habitantes de la zona mejor decidían seguir su trayecto a pie. Una salida fue ir hacia la autopista del Sol, tanto para entrar o salir de la Ciudad de México.

Mientras que unos policías subieron al techo del restaurante, otros resguardaban alrededor y adentro estaban dos personas golpeadas que habían sido secuestradas por los sinaloenses. No se informó si son hombres, mujeres, menores o mayores de edad, salvo que están bien de salud.

“Claramente es una casa de seguridad donde tienen almacenada una cantidad importante de armas y sobre todo armas de alto poder y también droga”, dijo García Harfuch al salir del restaurante y luego de que algunos detenidos comenzaron a ser enviados al Ministerio Público.

Los secuestradores no son de la Ciudad de México ni conformaban a los Maceros, según el secretario, quienes eran dirigidos por Agustín López Robles, Don Agus.

Este peligroso narcotraficante también se dedicaba a la venta de armas desde Tlalpan en disputa con los Guerreros en Topilejo. La zona de la balacera reciente era dominada por el cabecilla, quien fue detenido en febrero de 2021 y a finales del mismo año cayó su socio principal, Jorge Cruz Camacho, el Lagarto y/o el Oaxaco.

Versiones preliminares indican que el enfrentamiento de esta tarde tuvo como trasfondo la irrupción de operadores del Cártel de Sinaloa, pero las autoridades aún no han confirmado esa hipótesis. Supuestamente, las víctimas secuestradas eran para integrarlos a quienes desean dominar el mercado negro en la venta de drogas.

El alcance de lo decomisado muestra intereses de un poderoso cártel, pues al interior de la casa de seguridad fueron aseguradas fusiles de uso reservado al Ejército como fusiles Barret Calibre .50 y una del tipo M2, conocida como ametralladora Browning.

García Harfuch añadió que también se incautaron nueve fusiles más, uno de ellos con aditamentos lanzagranadas, centenas de municiones de grueso calibre, tres pistolas, 12 granadas, chalecos balísticos, cascos, radios de comunicación y 74 cargadores. Además se aseguraron bolsas con marihuana.

Por lo pronto, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México inició una Carpeta de Investigación por la balacera en inmediaciones de Topilejo. Los detenidos, el pequeño arsenal, así como la droga, ya fueron presentados para su procesamiento. Agentes de la dependencia ministerial como Policías de Investigación y peritos desarrollan diligencias para recabar evidencias que sumen a las indagatorias.

SEGUIR LEYENDO: