Claudia Sheinbaum, Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, y Guillermo Calderón, director del sistema de Transporte Colectivo Metro (STC) anunciaron el programa de modernización de la Línea 1, que incluye la compra de 29 nuevos trenes, que ya se están fabricando en China por empresas de vanguardia.
En 2020 se supo que la empresa china CRRC Zhuzhou Locomotive, una subsidiaria de China Railways, ganó el contrato por 1600 millones de dólares para los trabajos de renovación de la línea 1 del metro capitalino, superando a la española Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF), que finalmente tuvo que desistir en la etapa final de la licitación bajo el argumento de que reducir tanto los costos podría implicar riesgos en la calidad de los servicios.
Así, CRRC Zhuzhou Locomotive y CRR Hong Kong Company, filiales de la mayor constructora china de trenes y ferrocarriles, obtuvieron un contrato por más de 37 mil millones de pesos, a pagar en 19 años. Además de los nuevos trenes, estará encargada de realizar los trabajos de rehabilitación en la línea y la instalación de un nuevo sistema eléctrico y pilotaje automático.
CRRC, la empresa ganadora del contrato en el Metro de la CDMX, protagonizó en 2014 una polémica con la administración de Enrique Peña Nieto por la cancelación del Tren México-Querétaro, debido a una presunta conexión entre esa empresa china y el Grupo Higa, empresa que habría vendido la “Casa Blanca” a la esposa del entonces presidente de la República.
Vetada por el gobierno de EEUU
En noviembre de 2019, el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, emitió un decreto que prohíbe las inversiones estadounidenses en 31 compañías chinas de las que se sospecha están controladas por el ejército de esa nación asiática. En ese listado se incluyó a CRRC Corporation Limited, la mayor constructora de trenes, que según el Pentágono es una de las firmas con las que se financia el aparato militar de China.
Pero no solo Donald Trump aplicó sanciones sobre esta empresa, su antecesor, Barack Obama también implementó algunas acciones al ver su avance agresivo en América Latina, donde ofreció a varios países financiar proyectos de infraestructura. Uno de ellos fue en Nicaragua, donde la compañía china pretendía abrir una vía acuática para competir con el Canal de Panamá, no obstante, en 2016 el proyecto quedó suspendido.
De acuerdo con la compañía CRRC ZELC, su negocio se centra en locomotoras eléctricas, vehículos ferroviarios urbanos, locomotoras eléctricas de batería, trenes de levitación magnética, tranvías eléctricos, refacciones y servicios generales de contratación de servicios electromecánicos. Señala que cuenta con 21 subsidiarias que se distribuyen en China y otros países.
En su columna del 20 de noviembre de 2020, Raymundo Riva Palacio explicó que ante el Congreso de EEUU, la Alianza por la Seguridad Ferrocarrilera del país norteamericano denunció que esta empresa china aplica tácticas desleales para ganar contratos a bajo costo.
“Entre las prácticas que les facilitan bajar sus costos, dijo en una audiencia en el Congreso, en septiembre pasado, el vicepresidente del grupo de cabildeo, Erik Olson, se encuentran violaciones laborales que han permitido la “explotación” de niños y minorías en China”, explicó el periodista.
Calderón, director del Metro, indicó que con casi 53 años de servicio, se rebasó la vida útil de los sistemas que permiten la operación de la Línea 1, por lo que el cierre de casi un año es necesario y la modernización indispensable.
“Son 29 trenes nuevos de alta tecnología, muy modernos y diseñados y fabricados profesamente para la Ciudad de México”, dijo el directivo, quien dijo que estos tendrán un 35% de mayor capacidad.
Dijo que los nuevos carros estarán conectados por un solo pasillo: “Tiene la gran ventaja que permite que haya una ventilación al interior del tren además de la calidad de viaje”.
Dijo que aunque los trenes se fabricarán en China, serán ensamblados en México por 120 técnicos mexicanos y en septiembre llegará el primero de ellos, el cual será denominado “cabeza de serie”.
Esta empresa china participa en proyectos ferroviarios en países de América Latina como Colombia en la denominada Ruta de la Leche, la línea F del Metro de Buenos Aires en Argentina, la ruta 68 en Valparaiso en Chile, además de participar en los metros de Quito, Ecuador, y Sao Paulo, en Brasil.
SEGUIR LEYENDO: