Jesús “N”, de 79 años, ha dado la vuelta a los medios de comunicación por su presunta implicación en el asesinato de la cantante Yrma Lydya, su esposa y a quien supuestamente habría disparado, de acuerdo con la carpeta abierta por las autoridades.
A pesar de que negó haber cometido el asesinato, autoridades capitalinas consideraron como legal su detención y se le dictó prisión preventiva para enfrentar su proceso encerrado.
Sin embargo, se han corrido diversos rumores sobre la importante posición del sospechoso en rubros como la seguridad privada, pero también la seguridad pública, donde se advirtió, a través de Alonso Castillo, hijo de Laura Cuevas, que el presunto asesino mantiene una relación con Alejandro Gertz Manero, fiscal mexicano.
Al respecto, el periodista mexicano Raymundo Riva Palacio consideró a través de su más reciente columna para Ejecentral que a pesar de la sorpresa que causó entre la ciudadanía, se trataban de actitudes normales en el también abogado, a quien se refirió como alguien que siempre despachaba en la planta baja del Suntory “y siempre traía una pistola colgada”.
Sin embargo, el columnista dio a conocer las importantes redes que tejió a lo largo de su carrera entre las esferas más altas del poder, al grado de asegurar que financió “al menos a un partido político” del que no dio mayores detalles.
Algunas de las más importantes fueron exactamente dentro del Poder Judicial y del gremio dedicado a la seguridad, donde se distinguía, apuntó Riva Palacio, “por la forma prepotente con la que trataba a mucha gente”. Pero hizo énfasis en que todavía tiene un acercamiento bastante personal e institucional con funcionarios influyentes cercanos al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Fuentes militares le habrían asegurado al columnista de Ejecentral que uno de sus contactos es Audomaro Martínez Zapata, director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y quien propuso a Luis Crescencio Sandoval como el secretario de la Defensa Nacional frente al líder de la Cuarta Transformación.
La supuesta conexión que tiene es a través de una empresa llamada Sedegral que tiene especial interés por la seguridad privada desde su fundación, aunque no son parte de la misma, pero sí el fundador Oscar Audomaro Martínez, hijo del director del CNI.
Entre los datos más importantes que lanzó Riva Palacio, es que se trata de una empresa que obtuvo por lo menos tres contratos con la Procuraduría General de la República de 2018 a 2020, con Sedena, Semar y el Banco Nacional del Ejército.
“Las relaciones del abogado dentro de la Secretaría de la Defensa Nacional, eran algo de lo que el abogado llegó a presumir durante varios años”, señaló el periodista.
Por otra parte, fuentes dentro de la Fiscalía General habrían narrado al analista político que otro par de sus personas de confianza son ni más ni menos que Alejandro Gertz Manero, fiscal general, y el fiscal especializado en Control Competencial, Juan Ramos.
Como prueba, aseguró, le informaron que supuestamente solían ver al presunto asesino de la cantante Yrma Lydya en las oficinas de los mencionados, con intenciones de tratar casos de su competencia fuera de los tribunales.
Aunque aseguró que son temas hasta el momento sin datos concretos, Riva Palacio apuntó que “son variables que hay que observar con cuidado en el proceso judicial que se llevará contra el abogado” y llamó a las autoridades a que “permitan que la justicia haga su trabajo”.
Lo anterior, concluyó, pese a que lo relevante y mediático que se volvió el caso no permitirá que se actúe fácilmente a su favor, preocupa porque “la última palabra no está dicha en este país donde pesa tanto el influyentismo”.
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