Hace un par de días Japón anunció que reabrirá sus puertas a los turistas. A partir del 10 de junio le puso fin al cierre que mantuvo por dos años debido al COVID, sin embargo solo podrá ser posible si se viaja en grupos organizados.
Dicha decisión fue tomada después de que el gobierno de Fumio Kishida diera a conocer la semana pasada que probaría abrir las fronteras a viajes organizados en pequeños grupos con turistas de Estados Unidos, Australia, Tailandia, Singapur y 98 países más, incluido México.
Durante la mayor parte de la pandemia la “tierra del sol naciente” prohibió la entradas de todos los turistas y solo permitió el regreso de los ciudadanos japoneses y otros residentes extranjeros, sin embargo, los fueron excluyendo paulatinamente. Las medidas que tomará para los grupos es que lleguen juntos y permanezcan en conjunto para tomar una cuarentena de 3 días, posterior a eso no hay algo que indique que no puedan realizar sus actividades por separado.
Las personas que lleguen al país deben dar negativo en las pruebas correspondientes antes de viajar, es decir, se tienen que realizar un test de COVID y además hacer una cuarentena de tres días. Se dio a conocer que el ministro japonés Kishida indicó que quiere relajar los controles en las fronteras, pero la medida tomará su tiempo, ya que los ciudadanos japoneses apoyan las restricciones actuales.
Ahora bien, si se quiere realizar un viaje a Japón es necesario tomar en consideración cuánta comodidad quiere disfrutarse, los lujos a los que se quiere acceder, además de tomar en cuenta la temporada del año en la que se piensa viajar, alojamiento, transporte, comida, lugares turísticos y llevar un “colchoncito” por si se necesita algo no contemplado.
Con base en lo anteriormente expuesto se puede calcular un promedio de mil 600 o hasta 2 mil 864 pesos mexicanos en gastos diarios. Contemplando ya el costo del boleto de avión, que son unos 38 mil pesos -depende también de la época en la que se viaje y las escalas que realice el avión-.
Con ese presupuesto más el monto del presupuesto por día y sumando el boleto aéreo, se pueden visitar templos y otros sitios turísticos.
Un buen punto para Japón es que siempre se puede encontrar un hotel y un transporte más barato, al igual que la comida, con lo que se puede ahorrar dinero pero sacrificando comodidades.
Para un viaje de 15 días de México a Japón el presupuesto mínimo es de casi 75 mil pesos, en caso de que el plan sea más mochilero, los costos se reducen considerablemente.
Aquí un aproximado:
Vuelo = $25,000
Japan Rail Pass = $9,600 (membresía por 15 días)
Transporte local = $1,960
Hospedaje = $400 (la noche en un hotel de 3 estrellas).
Comida = $1,500 por día
Algún extra o imprevisto = $3,500
Total aproximado: Entre 68 mil o 70 mil pesos mexicanos.
Respecto al hospedaje no importa mucho la opción que se escoja, pues generalmente son muy seguros y se puede escoger entre: Hostales (aprox. 800 pesos la noche), hoteles de lujo (aprox. entre 15 mil y 17 mil la noche), departamentos (en Airbnb pueden ir desde los 850 hasta los 5 mil pesos) y los Ryokan (hospedaje de lujo, cuesta entre 15 mil y 25 mil pesos por noche).
Con el transporte existen también varias opciones por ejemplo: Taxi (aprox. mil la tarifa para una distancia corta), Japan Rail Pass (pase de tren ilimitado por 7, 14 o 21 días, el costo va desde los 5 mil 900 hasta los 12 mil 500 pesos), transporte público y el Japan Bus Pass (al igual que el JRP, es una membresía de 7 hasta 21 días, su precio va desde los 5 mil 600 hasta los 11 mil 500).
Referente a las atracciones, casi todas son gratuitas, sin embargo si hay varias que se deben pagar, por ejemplo: entradas a santuarios, castillos y templos, cuestan entre 80 y 170 pesos. El ingreso a museos o miradores suele tener un valor de 300 pesos.
Subir a la torre Tokyo Skytree cuesta alrededor de 350 pesos, entradas al bello castillo Himeji y al templo Kiyomizudera cuestan 70 y 80 pesos, respectivamente. En Kioto se puede obtener un pase con descuento para ingresar a muchos templos y transporte gratuito, por dos días.
Si se quiere vivir la experiencia completa se debe considerar gastar en los típicos Karaoke, bebidas tradicionales, realizar una que otra compra como obsequios y demás, y probar comida de máquinas expendedoras tradicionales.
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