Para el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard, no hay duda de que los altos niveles de violencia que se viven hoy en día en México están vinculados por el tráfico de armas desde los Estados Unidos.

Este martes, durante su participación en un seminario para la Universidad de Oxford (Reino Unido), el canciller señaló que, desde 2004, cuando dejó de estar vigente en EEUU las restricciones de armas de alto poder, incrementaron significativamente en el país los homicidios, lesiones o heridas con dichas herramientas.

“Si no logramos reducir la disponibilidad en nuestro país, es muy difícil reducir los niveles de violencia que tenemos; no hay forma, es muy difícil”, enfatizó.

En este contexto, calificó como prioridad la demanda que entabló el gobierno mexicano en 2021 contra 10 grandes compañías fabricantes de armas en el estado Massachusetts, a las que acusa de comercio negligente.

Ebrard argumentó que dichas compañías son conscientes de que sus productos se trafican ilegalmente a México para abastecer a los grupos del crimen organizado.

Cabe mencionar que la demanda fue presentada contra empresas como Smith & Wesson, Century Arms, Colt´s Manufacturing, Glock, Ruger y Barrett, cuyo rifle de francotirador calibre .50 es un arma de guerra utilizada por los cárteles de la droga.

Por lo anterior, se dijo confiado de que la Corte Federal en Boston falle a favor del gobierno mexicano, algo que sería histórico, para lograr una serie de regulaciones o modificaciones de la industria de armamentos que dificulten el acceso y la promoción de las armas que están produciendo.

El aspirante a candidato presidencial destacó el cambio de narrativa por parte del presidente Joe Biden sobre las disposiciones legales en Estados Unidos, quien diferenció las armas de cacería o defensa personal con las de destrucción de gran alcance.

“El reciente discurso del presidente Biden me pareció muy afortunado con la pregunta de ‘bueno, ¿por qué tenemos que permitir que una persona llegue y compre un arma de asalto?’ Es decir, ¿para qué la puedes necesitar?”, subrayó.

Finalmente, reconoció que hay otras medidas que se deben tomar, como la modernización de toda la línea fronteriza y la utilización de nuevas tecnologías para detectar el ingreso de armas ilegales, para lo cual se está invirtiendo USD 4 mil 400 millones.

El pasado 26 de enero, la SRE informó que México y Estados Unidos crearon un Grupo de Trabajo sobre Tráfico de Armas que forma parte del plan de seguridad “Entendimiento Bicentenario”.

Según Roberto Velasco, jefe para América del Norte de la SRE, se trata del inicio de un programa binacional que busca incrementar de forma significativa el número de decomisos de armas y municiones ilegales que alimentan a los cárteles de la droga por la frontera común, así como el enjuiciamiento a los traficantes

Y es que en conferencia de prensa señaló que reducir el flujo ilícito es una de las prioridades para el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador en busca de la construcción de paz.

Entre otros acuerdos, se destacó agilizar la judicialización de casos, aumentar las extradiciones hacia ambos países, fortalecer los operativos espejo en la frontera común, trabajar en conjunto para modernizar la tecnología de inspección en la frontera y aumentar el intercambio de información balística y de inteligencia.

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