Una mujer fue detenida en Tijuana, Baja California, con 60 mil pastillas de fentanilo, las cuales presuntamente vendía en calles de la ciudad fronteriza, entidad en la cual se han asegurado en las últimas semanas narcolaboratorios y puntos de almacenaje que contenían importantes cantidades del opioide.
María “J” fue detenida en mayo pasado, y posteriormente vinculada a proceso este miércoles 15 de junio por su presunta responsabilidad en delitos contra la salud en su modalidad de posesión con fines de comercio.
De acuerdo con lo informado por la Fiscalía General de la República (FGR), María “J” fue capturada por policías de la Fuerza Estatal de Seguridad Ciudadana (FESC), quienes fueron notificados por una ciudadana de la presencia de personas con actitud sospechosa en un estacionamiento.
Al acudir al lugar, los elementos de seguridad se percataron de una persona que se encontraba subiendo diversos paquetes a un vehículo, por lo cual realizaron una inspección preventiva, la que derivó en el aseguramiento de bolsas con 60 mil pastillas de fentanilo, así como cinco kilos 144 gramos del opioide en polvo.
Por los hechos fue detenida María “J”, quien fue trasladada a las inmediaciones del Ministerio Público de la Fiscalía General de la República (FGR), lugar en el cual se integró la carpeta de investigación por los hechos, para posteriormente derivar en la primera audiencia ante la acusada.
El MP de la Unidad Especializada en Investigación de Delitos Contra la Salud (UEIDS) presentó ante un juez de causa argumentos y pruebas suficientes para que se le vinculara a proceso por delito contra la salud en su modalidad de posesión con fines de comercio.
La procesada se encuentra bajo prisión preventiva oficiosa en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de Tijuana, Baja California; además, las autoridades fijaron el plazo de un mes para la realización de las investigaciones complementarias para el caso.
El pasado 12 de junio autoridades federales aseguraron un cargamento de fentanilo oculto en una pieza mecánica de gran tamaño, la cual era transportada al interior de un camión de paquetería que circulaba por calles de San Quintín, Baja California.
La Fiscalía General de la República dio a conocer que agentes de la dependencia ubicaron el cargamento cuando se encontraba circulando al interior del vehículo en la carretera San Quintín-Ensenada.
Al lugar se movilizó un binomio canino, el cual alertó de la presencia de mercancía sospechosa en un “objeto voluminoso de metal que, al ser inspeccionado, se encontró sustancia en su interior”.
Semanas antes del aseguramiento, la misma FGR desmanteló un narcolaboratorio de fentanilo al interior de una casa en la ciudad fronteriza de Tijuana, lugar en el cual agentes federales aseguraron dosis del narcótico y equipo para su sintetización.
El inmueble con las instalaciones clandestinas fue ubicado en la colonia Valle Verde, a cuatro kilómetros de la frontera con Estados Unidos, lugar al cual se desplazaron elementos de la Policía Federal Ministerial y de la Agencia de Investigación Criminal.
Al interior del domicilio fueron asegurados 36 kilogramos de fentanilo, así como dos tableteadoras, una comprimidora, dos prensas hidráulicas con tres moldes metálicos y documentación diversa.
De la misma forma, fueron confiscados cuatro contenedores de cartón, los cuales contenían polvo blanco y estaban etiquetados bajo la leyenda “metamizoles sodium”, cuyo peso fue calculado en 93 kilogramos.
Tijuana es uno de los principales puntos de tráfico de narcóticos desde México hacia Estados Unidos, por lo que distintas bandas criminales emplean varios métodos para realizar sus operaciones delictivas sin ser descubiertos, incluídos los cientos de narcotúneles descubiertos por autoridades mexicanas.
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