Con 33 votos a favor, siete abstenciones y un impedimento, el Congreso del estado de Puebla aprobó este jueves prohibir las terapias de conversión de identidad de género en las personas de la comunidad LGBTQ+.
De esta forma, las y los legisladores modificarán el Código Penal de la entidad para tipificar como delito los Esfuerzos para Corregir la Orientación Sexual e Identidad de Género (Ecosig) y se sancionará a quien las practique, incite o financie con uno hasta tres años de prisión, así como una multa de hasta 34 mil 574 pesos.
Cabe mencionar que dichas terapias se traducen en tratamientos psicológicos, psiquiátricos y/o religiosos que tienen como objetivo revertir las tendencias homosexuales de un individuo.
El diputado morenista, Carlos Alberto Evangelista, quien presentó ante el pleno la iniciativa de reforma, expresó que las personas que se identifican como parte de la comunidad LGBTTIQ+ no pueden ejercer el libre desarrollo de la personalidad que son sometidas a técnicas como las terapias de conversión.
“No hay nada que curar”, señaló el diputado al destacar que la homosexualidad no está tipificada como una enfermedad desde 1990 y señaló que los jóvenes LGBTTIQ+ son sometidos a tortura.
“No estamos hablando sobre cómo educar a nuestros hijos, estamos hablando de que nadie nos engañe y no se acepte esta técnica”
A través de su cuenta de Twitter, el diputado y colectivos celebraron la votación de este jueves en el Congreso.
“Hoy es un día para celebrar, se logró por votación mayoritaria tipificar como delito las mal llamadas terapias de conversión”
El morenista también destacó la postura del gobernador Miguel Barbosa que el miércoles consideró que las terapias de conversión violan los derechos humanos y “forman parte de una posición muy fuera de este tiempo”.
“Para mí este tipo de terapias son violatorias de derechos humanos, solo voy a decir eso, pero es asunto legislativo que lo tendrán que resolver ellos y bueno, es muy legítimo que grupos de personas de manera individual o colectiva se pronuncien a favor o en contra”, señaló Barbosa el miércoles.
A las afueras del recinto se pudo apreciar una ola de banderas arcoíris, y de manera constante se escuchaban los gritos “¡Nada que curar!” y “¡Sí se pudo!”.
Colectivos como Vida Plena Puebla, Coalición Agnes, Chavos en la Diversidad, Lupito el Cerdito, ReDefine Puebla, entre otros celebraron la disposición, pues afirmaron que la homosexual ni bisexualidad son una enfermedad.
En 2020, el experto independiente sobre la protección contra la violencia y la discriminación por motivos de orientación sexual o identidad de género, el costarricense Víctor Madrigal-Borloz, presentó un informe temático ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) relativo a la práctica a las llamadas “terapias de conversión”.
En dicho Informe, al abogado analizó la situación global de dicha práctica, “prestando especial atención a sus efectos en las víctimas, sus implicaciones para los derechos humanos y su relación con la violencia y la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género, las medidas adoptadas para prevenir dichas prácticas y sancionar y enjuiciar a los responsables y las vías de reparación para las víctimas”.
El Informe fue presentado públicamente, bajo el auspicio del Programa de Derechos Humanos de la Escuela de Derecho de la Universidad de Harvard.
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