La propuesta de cancelación del Horario de Verano ha desatado múltiples reacciones tanto en el ámbito político como en la ciudadanía. A través de su cuenta de Twitter, el ex político panista Diego Fernández de Cevallos se lanzó contra el presidente mexicano y su administración y señaló que esta medida es un “caprichito” del mandatario que costaría 4 mil 600 millones de pesos al año.
Sin especificar el origen de tal cifra, Fernández de Cevallos se quejó por la “austeridad republicana de este gobierno de porquería” y aprovechó para utilizar el apodo con el que, en repetidas ocasiones, se ha referido a AMLO: “Tartufo”. Dicha palabra, de acuerdo con el Diccionario de la Real Academia Española, significa “hipócrita y falso”.
Esto ocurrió luego de que el pasado miércoles 1 de junio, Andrés Manuel López Obrador anunció en su conferencia de prensa que ya fue entregado el informe que realizaron en conjunto la Secretaría de Energía (SENER), la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y la Secretaría de Salud (SS) acerca de los efectos que provoca el Horario de Verano.
Los resultados del estudio se darán a conocer en los próximos días, pero AMLO adelantó que el cambio de horario genera un “mínimo ahorro”, así como “considerables daños a la salud”.
Concretamente, informó que este cambio de horario representa un ahorro de alrededor de mil millones de pesos al año en todo el país, lo cual, de acuerdo con el presidente mexicano, se podría subsanar con una campaña para economizar energía eléctrica.
En abril pasado, Infobae México entrevistó a Diego Coronel, maestro en Ciencias Médicas por la UNAM y especialista en Psiquiatría, quien aseguró que las personas con enfermedades crónicas como diabetes e hipertensión podrían sufrir las mayores complicaciones a causa de este cambio de horario, así como aquellas con trastornos psicológicos como depresión o ansiedad, debido a la necesidad de ingerir medicamentos en horarios específicos.
Aunque la polémica alrededor del tema se reavivó en meses recientes, esta no es la primera vez que AMLO impulsa la propuesta de eliminar el Horario de Verano.
Cuando el actual presidente de la República se desempeñó como Jefe de Gobierno del ahora extinto Distrito Federal, de 2000 a 2005, intentó impedir que el cambio de horario correspondiente al año 2001 sucediera mediante un decreto. En aquel entonces, sus argumentos fueron los efectos negativos que el Horario de Verano tendría en la salud de la población capitalina, así como los riesgos que implicaría para la seguridad y la economía de la sociedad mexicana.
En aquel entonces, la propuesta de López Obrador no tuvo respaldo alguno del gobierno federal, ante lo que declaró que se trataba de una medida arbitraria a merced de los intereses financieros.
Otro personaje que ha mostrado su interés en la eliminación del cambio de horario es el polémico diputado del Partido del Trabajo (PT) Gerardo Fernández Noroña, quien presentó en abril una iniciativa a la Cámara de Diputados que sería discutida el día 28 del mismo mes. Sin embargo, de último minuto, la Mesa Directiva retiró este debate de la orden del día y el tema quedó suspendido. Cabe aclarar que, inicialmente, la discusión se llevaría a cabo sin las opiniones de los expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), ni de la Secretaría de Energía (Sener) o de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
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