Dictaron prisión preventiva al hombre que presuntamente puso cámaras en baño de una secundaria en Nuevo León

Los delitos que le imputaron a Jorge Alonso “N” fueron pornografía infantil, acoso sexual y corrupción de menores

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En el Instituto Las Brisas
En el Instituto Las Brisas de Monterrey, encontraron cámaras de seguridad en los baños y arrestaron al dueño por presunta pornografía infantil (Foto: Twitter)

El día que parecía estar destinado a una fiesta más del Día del Estudiante en el estado de Nuevo León, terminó por convertirse en una pesadilla cuando alumnas de una institución secundaria privada encontraron cámaras en los baños de mujeres, escondidas dentro de botes de basura, razón por la que el dueño del inmueble fue detenido.

A través de una tarjeta informativa, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Nuevo León (FGE) se dio a conocer que la Audiencia Inicial por Control de Detención se realizó con éxito el día 23 de mayo de 2022 a través de una videoaudiencia.

Jorge Alonso “N” de 73 años, fue detenido por la Fuerza Civil señalado de pornografía infantil en las inmediaciones de la mencionada institución educativa privada de la ciudad de Monterrey, donde los padres dieron cuenta de la situación.

Los delitos que se le imputaron durante la primera audiencia fueron pornografía infantil, acoso sexual y corrupción de menores, por lo que la defensa de las víctimas solicitó la vinculación a proceso, mientras que la defensa del presunto agresor pidió ampliación de término constitucional para resolver la situación jurídica.

En este sentido, el juez responsable del caso concedió éste último recurso, por lo que tendrá que continuar la audiencia el día 27 de mayo de 2022, aunque se impuso la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa para Jorge Alonso “N”.

Jorge Alonso “N” de 73
Jorge Alonso “N” de 73 años, fue detenido por la Fuerza Civil señalado de pornografía infantil (Foto: Twitter)

Arrestaron a un hombre por presuntamente colocar cámaras en un baño

Las acciones tuvieron lugar durante una fiesta de jóvenes estudiantes de una secundaria con motivo del Día del Estudiante; la fiesta tuvo lugar en una quinta propiedad del Instituto Las Brisas de Monterrey.

Sin embargo, las estudiantes notaron algo raro en cuanto entraron a los baños de la quinta, y descubrieron que dentro de los botes de basura del baño, colocados en la tapa de los retretes con hoyos en el plástico, había cámaras supuestamente de seguridad.

O al menos eso fue lo que declaró Jorge “N”, quien aparentemente sería el dueño del instituto. Los padres acudieron a encararlo, y luego de encontrarlo en presunto estado de ebriedad, preguntaron las intenciones del sujeto.

“Por motivo de seguridad”, aclaró el detenido, quien más adelante aseguró que las cámaras simplemente se resetean, y que hay dispositivos así por todas partes en el colegio; sin embargo, los padres pidieron a la Fuerza Civil su arresto inmediato.

Las estudiantes notaron que dentro
Las estudiantes notaron que dentro de los botes de basura del baño había cámaras (Foto: Twitter)

Los agentes habrían accedido al plantel para hacer su trabajo, de acuerdo con los reportes oficiales, y el presunto responsable puesto a disposición del Ministerio Público Investigador el día 20 de mayo de 2022. La detención fue catalogada como legal por las autoridades.

“Permanece detenido en el término legal correspondiente para determinar su situación jurídica”, se lee en la tarjeta informativa que circularon desde la Fiscalía el mismo día de los hechos.

De acuerdo con el Código Penal Federal, en México comete el delito de pornografía infantil todo aquel o aquella que, sin importar el medio o recurso utilizado, comercie, distribuya o exponga a menores de edad a través escritos, grabaciones, fotografías o imágenes, reales o simuladas, actos sexuales o de exhibicionismo corporal con fines lascivos.

La o el autor de este delito se le impondrá pena de siete a doce años de prisión y de ochocientos a dos mil días multa.

Mientras que quien almacene, compre, arriende, este tipo material se le impondrán de uno a cinco años de prisión y de cien a quinientos días multa. Además, estará sujeto a tratamiento psiquiátrico especializado.

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